Desde 1995 se debió contar con un programa de manejo en la materia
indefensaante la falta de regulación ambiental
Lunes 12 de noviembre de 2012, p. 3
Desde el aire, las playas parecen una línea de gis blanco que sobresale entre el verdor de la espesa vegetación, el mar y las cristalinas aguas de las lagunas de la isla Holbox, en Quintana Roo, la cual forma parte del área de protección de flora y fauna Yum Balam, decretada en 1994. En la zona, donde se planea el desarrollo turístico La Ensenada, hay zonas de manglar y selva baja y mediana.
Yum Balam forma parte de un corredor de áreas naturales protegidas federales al norte de Quintana Roo. Está a un lado de la reserva de la biosfera marina Tiburón Ballena, decretada en junio de 2009, y también colinda con la reserva de la biosfera Ría Lagartos. Cerca también están el Parque Nacional Isla Contoy y la porción marina que lo circunda.
Cuando hace 18 años se estableció como área natural protegida, el decreto argumentó que la región posee ecosistemas con una gran biodiversidad neotrópical, con especies endémicas, raras y en peligro de extinción
.
Esa región, agrega, es una extensión de ecosistemas selváticos y humedales de la reserva de la biosfera Ría Lagartos.
Los ecosistemas están en condiciones poco alteradas, y entre las especies que allí habitan están las tortugas marinas caguama y carey, así como cocodrilos y aves, entre ellas el flamenco, el jaribú, la espátula rosada y el zopilote, y mamíferos como el mono araña y el aullador, el oso hormiguero, el jaguar, el puma, el tigrillo, el jabalí de labios blancos y el tapir.
Precisa que la superficie delimitada para el área está integrada por aguas de jurisdicción federal, terrenos nacionales, ejidales y de propiedad privada, es decir, incluye la laguna Yalahau, humedales y la isla Holbox. En total, 154 mil hectáreas.
Lo que dice la ley
Aunque el artículo 65 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente establece que un año después de que se decreta un área natural protegida se debe instaurar un programa de manejo, esto no ocurrió en 1995, cuando Julia Carabias era la secretaria de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca.
El programa de manejo define el tipo de actividades permitidas en el área protegida. El año pasado, ambientalistas y autoridades elaboraron un borrador, que debe de estar en algunas oficinas jurídicas del gobierno federal, pues no se ha publicado en el Diario Oficial De la Federación, señala Alejandra Serrano, directora de la oficina Sureste del Centro Mexicano de Derecho Ambiental.
La ausencia de un programa de manejo deja a la isla en la indefensión; se requiere, para que defina las zonas más importantes para la conservación
. En la isla hay playas importantes para la anidación de las tortugas; hay zonas de distribución de aves, como el flamenco y águilas pescadoras, y cocodrilos. Además están las cuatro especies de manglar (rojo, negro, blanco y botoncillo). Hay una calidad que no es fácil ver en otros sitios de Quintana Roo
, advierte Serrano.
La comunidad creó el Comité de Protección y Rescate del Manatí, en el que participan 26 personas, que con lanchas propias se dedican a la observación de esta especie. Es un animal noble; tarda cinco años entre cría y cría. Desde 2010 hacemos el trabajo de observación y vemos que permanentemente está en la zona del río Yalikin, que está frente adonde se va a hacer el proyecto turístico
, explica Gerardo, quien se dedica a la pesca. Dice que esta especie en riesgo de extinción anda en manadas: hemos visto hasta 50
.