Académicos del sistema semiescolarizado del Instituto de Educación Media Superior (IEMS) cerraron ayer el plantel Coyoacán para demandar ser reconocidos como trabajadores, ser basificados, prestaciones de ley y facilitar el acceso a los estudiantes a bibliotecas, laboratorios y salones de arte y música.

Desde las 7 horas, más de medio centenar de profesores impidieron el paso de estudiantes y colocaron cartulinas en la entrada de la preparatoria del Gobierno del Distrito Federal, en las que denunciaban la firma de contratos trimestrales alevosos, donde no se reconoce que estamos subordinados al instituto y éste no tiene ninguna responsabilidad con nosotros. Además, dijeron, la naturaleza civil del documento releva al IEMS de toda obligación ante posibles riesgos durante la permanencia del personal en las instalaciones, y considera que no están sujetos a un horario y actuarán bajo su criterio profesional y sin dirección técnica, cuando es todo lo contrario, ya que somos hasta evaluados por nuestros alumnos.

David Rodríguez, Irlanda Amaro, Edith Rodríguez, María de Lourdes Martínez y Rosangela Pérez señalaron que las condiciones laborales de cerca de 150 profesores del sistema semiescolarizado se han agravado, al no contar con un espacio físico para preparar clases.

Además, se han reducido las horas y sesiones para cumplir con el mismo programa del sistema escolarizado, pues se considera a nuestros alumnos, en su mayoría trabajadores, madres solteras y gente de edad, como de segunda, cuando tenemos un mejor porcentaje de egresos respecto del sistema escolarizado, afirmaron.

Sin embargo, persiste la negativa para que accedan a la biblioteca, laboratorios y clases de artes; además de “no reconocer nuestros derechos laborales y reducir el tiempo de firma de los contratos de seis a tres meses, para corrernos con la mano en la cintura con el argumento de que no hay dinero.

Hacia fuera de las instalaciones, comentaron, las autoridades capitalinas nos reconocen como trabajadores, pero internamente no lo somos, y con la inclusión de las cláusulas sexta y séptima en el nuevo contrato, donde se elimina cualquier vínculo patrón-trabajador, se libera (a la institución) de cualquier responsabilidad, lo que nos coloca en una situación más endeble.

Por ello, no vamos a liberar las instalaciones, donde se encuentran de manera temporal las oficinas del IEMS y de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, con el riesgo de que los alumnos pierdan su semestre, hasta que las autoridades nos reconozcan como académicos y faciliten nuestra labor y la de nuestros alumnos, advirtieron.