Washington, 26 de noviembre. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, habló durante el fin de semana con el líder de la Cámara de Representantes, el opositor John Boehner, sobre los esfuerzos para evitar el abismo fiscal de recortes al presupuesto y aumentos tributarios que amenazan con llevar al país a una recesión. Un funcionario de la Casa Blanca informó que Obama también habló con el líder de mayoría del Senado, el demócrata Harry Reid, y añadió que las discusiones entre los miembros de la cámara alta continuaban.

Pese a la urgencia de un acuerdo para evitar que Estados Unidos caiga en el abismo fiscal, Obama reiteró su oposición a firmar cualquier texto que impida subir los impuestos a los más ricos.

Desde el 2 de enero cerca de 600 mil millones de dólares en alzas de impuestos y recortes al gasto, incluidos 109 mil millones de dólares de rebajas a programas nacionales y defensa, entrarán en vigor si el Congreso no decide cómo remplazarlos con medidas de reducción del déficit menos extremas.

Por su parte, los republicanos muestran signos de que se podría llegar a acuerdo sobre el complicado tema, según un reporte difundido en el sitio digital de CNN.

Una encuesta de CNN/ORC Internacional divulgada este lunes muestra que la mayoría de los entrevistados apoya la postura demócrata acerca de que un acuerdo en el Capitolio debe incluir la combinación de recortes de gastos y aumentos de impuestos.

Obama y los demócratas insisten en que los estadunidenses ricos (aquellos con ingresos superiores a 200 mil dólares o familias que en total reciban más de 250 mil al año) deben pagar mayores gravámenes para que las tarifas del resto de los ciudadanos permanezcan iguales.