Líderes republicanos advierten que rechazarán cualquier intento por un mayor control
tema centralen su próximo periodo
Si los maestros hubieran estado armados, la matanza habría sido menor: dirigente de asociación
Jueves 20 de diciembre de 2012, p. 19
Nueva York, 19 de diciembre. El presidente Barack Obama anunció hoy su intención de presentar amplias propuestas sobre el control de armas al Congreso en enero. Esta es la primera vez, desde que llegó a la Casa Blanca, que se atreve a enfrentar uno de los temas políticamente más complicados en este país, donde el derecho a las armas es considerado casi sagrado.
Nombró al vicepresidente Joe Biden encargado de una comisión del Ejecutivo para elaborar propuestas y medidas sobre el control de armas, al calificarlo como un tema central
al inicio de su segundo periodo. Esta vez, las palabras tienen que llevar a la acción
, afirmó Obama desde la Casa Blanca, y se comprometió a utilizar todos los poderes de esta oficina para promover esfuerzos dedicados a prevenir tragedias como ésta
, al referirse a la matanza de 20 niños de primaria y seis adultos en Newtown, Connecticut.
Por un lado, es la primera vez que este presidente procede a emprender alguna acción sobre el rubro de control de armas desde que llegó a la Casa Blanca. Por otro, la ausencia de una acción anterior, no obstante otros incidentes de matanzas ocurridas este año en Colorado, California y otros lugares, es una confesión de qué tan difícil es la batalla política aquí para promover algún cambio, aun mínimo, para fortalecer los casi inexistentes controles sobre armas de fuego.
Más de 40 estados en EU permiten la portación
Los promotores del derecho a las armas, que argumentan está garantizado por la segunda enmienda de la Constitución, han logrado durante los últimos 20 años imponer su agenda en el país. Hoy día, 41 estados tienen leyes que permiten portar armas, y se han debilitado sistemáticamente leyes estatales y federales que imponían restricciones.
Justo un día antes de la matanza en Connecticut, la legislatura estatal de Michigan aprobó un proyecto de ley que permite que las armas sean portadas en las escuelas. Por estos días, Florida estaba por llegar al millón
de permisos para portar armas de manera oculta en ese estado.
Pero la coyuntura política es favorable para promover mayores controles sobre las armas de fuego en este país como resultado de la atroz masacre de niños el viernes pasado. Las poderosas asociaciones contra la no regulación a las armas, y los políticos que defienden esa libertad
están a la defensiva. Mientras tanto, hay una presión enorme sobre el presidente y la cúpula política para hacer algo
.
Otras figuras políticas buscan usar el momento para intentar impulsar nuevas medidas de control. La senadora demócrata por California, Dianne Feinstein, ya anunció que presentará un proyecto de ley para renovar la prohibición de armas de asalto el primer día de sesiones del nuevo Congreso el mes entrante. Otros colegas, algunos que anteriormente se oponían, han indicado que apoyarán algunas medidas para imponer mayor control.
Sin embargo, la Asociación Nacional del Rifle (NRA) y otras poderosas organizaciones y políticos favorables a las armas que por ahora mantienen un perfil bajo, no se quedarán quietos.
De hecho, líderes republicanos en la Cámara de Representantes (donde son mayoría) desde ahora ya rechazan cualquier intento de imponer mayores controles. El representante Robert Goodlatte, quien será el presidente del Comité Judicial, ya dijo ayer que vamos a examinar lo que ocurrió ahí (en Connecticut) y qué se puede hacer para evitarlo en el futuro, pero el control de armas no es algo que apoyaré
, comentó al periódico especializado en el Congreso, Roll Call. Otros reiteran el argumento de que no hay pruebas de que un mayor control de armas reduzca la tasa de criminalidad, y señalan que el asunto tiene más que ver con problemas mentales que con armas.
Otros entusiastas de las armas
no han guardado silencio. Larry Pratt, director ejecutivo de la asociación nacional de dueños de armas, Gun Owners of America, declaró que si los maestros hubieran estado armados, la matanza en Newtown podría haber sido limitada. No sólo eso, sino que culpó a los promotores del control de armas por la tragedia. Los que apoyan el control de armas tienen la sangre de pequeños niños en sus manos. Leyes federales y estatales se combinaron para asegurar que ningún maestro, ningún administrador, ningún adulto, tuviera un arma en la escuela en Newtown, donde los niños fueron asesinados
. Por lo tanto, abogó por deshacerse de las prohibiciones a la tenencia de armas en zonas escolares, para que los asesinos puedan ser enfrentados con un arma
.
Pero las secuelas de la matanza continúan cambiando el panorama en torno a este debate. Cerebrus Capital, un poderoso fondo de inversiones que es dueño de Bushmaster, la empresa que fabrica el rifle Bushmaster AR-15 usado en la matanza el viernes pasado, anunció ayer que la vendería, después de que el fondo de jubilaciones del sindicato de maestros de California amenazó con retirar su inversión en Cerebrus. Un medio en Utah, Deseret, anunció que estaba suspendiendo toda publicación de anuncios para compra y venta de armas de fuego en su sitio de Internet. Mientras tanto, algunos padres y familiares de las víctimas en Newtown ya se han organizado en una agrupación para promover mayores controles, con el apoyo del Brady Campaign to Prevent Gun Violence, una de las principales organizaciones que abogan por controles más estrictos, y una delegación se ha reunido ya con políticos en Washington. Mientras, decenas de miles han firmado peticiones en el sitio de Internet de la Casa Blanca para que presidente emprenda más acciones.
Estoy convencido de que la mayoría de los estadunidenses respaldarán leyes de control de armas más estrictas
, comentó el documentalista Michael Moore, quien exploró todo este tema en su película Bowling for Columbine.
Hoy en Newtown se realizaron seis funerales más de víctimas de la matanza del viernes pasado.
Cada día que los políticos debaten, elaboran o evalúan propuestas, un promedio de más de 200 personas serán heridas o asesinadas por armas de fuego en este país, casi 100 mil al año.