Washington, 20 de mayo.

Al menos 51 personas murieron hoy en el sur de la ciudad estadunidense de Oklahoma y en la vecina comunidad de Moore, entre ellos siete niños, quienes perecieron en una escuela primaria, que fue arrasada por un potente tornado.

Los cuerpos de los siete menores fueron localizados dentro de la escuela en el sur de Oklahoma, destruida junto con cientos de viviendas de Moore, por el gigantesco tornado cuyos vientos fueron de más de 300 kilómetros por hora.

Las autoridades temen por la vida de otros 30 menores que se encontraban dentro de la primaria Plaza Towers cuando el meteoro azotó el área poco después de las 14:00 horas local.

Al parecer, unos 70 niños estaban resguardados allí (en Plaza Towers), informó la televisora estatal KFOR de Oklahoma, durante la cobertura del tornado.

El hallazgo de los cadáveres de los menores se suma a los de otras 44 personas entre las viviendas destruidas de los barrios del sur de Oklahoma.

Imágenes de televisión mostraron casas destruidas, vehículos apilados uno sobre otro y al menos un edificio en llamas. El número de heridos continúa sin ser confirmada.

Los daños mayores fueron provocados por el tornado de unos tres kilómetros de ancho, que barrió una franja de 32 kilómetros de largo en Moore y en el sur de la ciudad de Oklahoma.

Las autoridades estimaron que el número de decesos puede superar los 44 que se reportaron durante los tornados del 3 de mayo de 1999.

La escuela primaria Plaza Towers es una de las dos que fueron destruidas por el tornado, junto con la primaria Briarwood, en el sur de la ciudad de Oklahoma, donde se teme que haya más víctimas.

Anticipamos que estas tormentas van a seguirse formando alrededor de Oklahoma, declaró la gobernadora, Mary Fallin, a la cadena CNN, mientras que el Servicio Meteorológico Nacional exhortó a los residentes a ponerse a resguardo.

Los equipos de rescate, con apoyo de voluntarios, buscan a sobrevivientes en un área de más de 50 kilómetros cuadrados de escombros.

El gobierno de Oklahoma acondicionó la noche del lunes gimnasios y otras instalaciones para albergar a cientos de personas que se quedaron sin casa y fueron desplazadas por la tormenta.

El domingo, los tornados dejaron dos muertos y 39 heridos también en Oklahoma.