Los más pobres verían subir 161.2% ese impuesto, indican
Las grandes empresas contarían con mayores devoluciones de impuestos
Lunes 27 de mayo de 2013, p. 14
Una reforma fiscal que grave alimentos y medicinas, además de ser regresiva, contribuiría a dar certeza al capital financiero. Con la generalización del IVA, los más pobres verán subir el pago de ese impuesto 161.2 por ciento, mientras que para los más ricos aumentará menos de 50 por ciento, señalaron Alejandro López Bolaños y Josefina Morales Ramírez, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
‘‘En el caso de la población con menores ingresos, 52.3 por ciento de sus percepciones se destina a la adquisición de alimentos, en contraste con 28.4 por ciento del gasto para ese fin que canalizan los hogares de mayores recursos. Por esta razón, un gravamen del IVA a los alimentos afectaría de manera más significativa a las familias más pobres.’’
Al realizar un análisis sobre la reforma fiscal, los expertos del Grupo de Análisis de la Coyuntura de la Economía Mexicana (Gacem) del IIE, expusieron que ésta ‘‘no contribuirá a mejorar la estructura de los ingresos tributarios, pero sí dará protección al gran capital, en particular al financiero. Además de avanzar la apertura y posterior privatización de Pemex, la baja en la recaudación será estrepitosa, pues la Secretaría de Hacienda compensa con los ingresos y utilidades de la paraestatal lo que no cobra (e incluso devuelve) a las grandes empresas’’.
Tal es el beneficio que se da a los más poderosos, que en 2011 a los ‘‘grandes contribuyentes’’ se les regresaron más de 219 mil millones de pesos, equivalentes a 10.7 por ciento de los ingresos recaudados.
En el análisis, publicado en el más reciente boletín mensual Momento económico, los académicos advirtieron que de gravar con IVA alimentos y medicinas, las grandes empresas se verán aún más favorecidas, pues contarán con saldo a favor por el pago de impuesto a intermediarios, por lo que se les devolverán más impuestos.
‘‘Algunos grupos empresariales que en teoría saldrían perjudicados con el gravamen del IVA en alimentos, como la empresa Bimbo, están en favor de esta medida fiscal, ya que reciben 6 por ciento de las devoluciones que corresponden a los grandes contribuyentes. De aprobarse, estas empresas tendrían mayores devoluciones y mejorarían sus ganancias cargando el peso del impuesto en sus consumidores.’’
Por ello, los académicos plantean que más allá del pretendido incremento del IVA ‘‘se debe avanzar en una mejor recaudación, con la insistencia de que quienes obtengan mayores recursos sean quienes más tributen, omitiendo prácticas como la consolidación fiscal (la cual permite que en un conjunto de empresas se puedan transferir las pérdidas para reducir así las ganancias y pagar menos impuestos).
El reporte completo se puede consultar en www.iiec.unam.mx.