Alrededor de 40 por ciento de las personas con peso corporal normal presenta daño metabólico, es decir, alteración en sus niveles de presión arterial, triglicéridos y resistencia a la insulina. Las tres son la antesala para desarrollar enfermedades crónicas cardiovasculares, diabetes, hígado graso y cáncer, aseguró la organización El Poder del Consumidor.

Entre las causas de estos problemas de salud está el elevado consumo de azúcar o fructosa (contenida en los refrescos) que carecen de nutrimentos. Son calorías vacías que, además, producen adicción, asegura un estudio de la organización civil.

Con base en estos y otros datos, la agrupación presentó una denuncia ante la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la Procuraduría Federal de Defensa del Consumidor (Profeco), a fin de que ordenen el retiro de la campaña de publicidad 149 calorías de la empresa Coca Cola y apliquen las sanciones previstas en las leyes vigentes.

El director de El Poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, señaló en conferencia de prensa que los mensajes que se transmiten en medios electrónicos, impresos y espectaculares engañan a la población, en el mejor de los casos, pero en el peor pueden ser causa de graves daños a la salud.

Resaltó el caso de uno de los anuncios en el que aparece una mujer embarazada con su pareja, y ella sosteniendo un refresco de cola. Xaviera Cabada, coordinadora del área de salud alimentaria de la organización civil, resaltó que ya se ha comprobado científicamente que la nutrición inicia desde la gestación. A partir del cuarto mes, el producto ya identifica sabores, pero si estos son azúcar o fructosa del refresco, no se le hace ningún bien.

Al contrario, si la mamá toma refresco, desde antes de nacer se coloca al bebé en riesgo de desarrollar enfermedades como las mencionadas.

Calvillo comentó que parte del engaño en los mensajes está en que se hace creer a las personas que las calorías del refresco son iguales a las que aportan los alimentos naturales, lo cual es falso. También existe la evidencia científica sobre el daño metabólico que provoca la ingesta de las llamadas calorías vacías.

En México esto es más grave por el problema de sobrepeso y obesidad que afecta a 70 por ciento de los adultos y 30 por ciento de los niños. Es una población que ya está excedida en el consumo de calorías y reporta un déficit en la actividad física que realiza, por lo que inducirla a consumir bebidas con altos niveles de azúcar y al mismo tiempo hacerle creer que mantendrá una buena salud si camina con su perro o anda en bicicleta, es una mentira, subrayó.

Con respecto a la adicción, el análisis de El Poder del Consumidor refiere que la ingesta de azúcar en grandes cantidades como las que tienen los refrescos provoca dependencia, cambios en el comportamiento y en los hábitos alimenticios.