Munich, 24 de junio.

El Bayern Munich, ganador de un inédito triplete la pasada temporada, presentó el lunes a su nuevo entrenador, el español Josep Guardiola, en medio de un frenesí mediático, en un momento en que el club alemán intenta mantener la hegemonía en su país y en Europa.

El ex técnico del Barcelona dijo estar preparado para aceptar el reto de dirigir a un equipo que terminó una campaña sobresaliente bajo las órdenes de Jupp Heynckes, quien los llevó a ganar la liga y la copa local, así como la Liga de Campeones.

Debo aceptar la comparación. Tengo que ser capaz de vivir con eso. Estoy bajo presión, por supuesto, y acepto este reto sin temor y por eso soy el entrenador, abundó.

Mi periodo en el Barcelona fue fabuloso. Pero yo tenía la necesidad de un nuevo desafío. El Bayern me ha ofrecido esta oportunidad, señaló el estratega español, quien se tomó un año sabático tras abandonar el club catalán en 2012, y pasó la mayor parte del tiempo en Nueva York.

Guardiola, quien ganó 14 trofeos en cuatro años con el Barcelona, es el mayor fichaje del Bayern para la próxima temporada, en la que el club alemán seguirá buscando títulos.

Añadió que llegar a la escuadra alemana es como un regalo, es una bendición estar aquí con el Bayern y pienso que este banco es para mí un regalo.

El estratega, que firmó por tres años, resaltó que la primera razón para aceptar la oferta del Bayern eran los jugadores y la historia del club.

A veces te haces cargo de un equipo que va en trayectoria descendente (...) como fue mi primer año como entrenador profesional, destacó Pep, flanqueado por los máximos dirigentes del club: el presidente Uli Hoeness, el presidente ejecutivo Karl-Heinz Rummenigge y el director deportivo Matthias Sammer.

Esta situación es totalmente diferente. Es bueno que sea así. Asumir el cargo en un equipo que ha jugado de forma excepcional la temporada pasada. Ganaron tres títulos. Esta es la situación. Cuando eres entrenador del Bayern siempre tienes la presión de jugar bien, sentenció el estratega.