Los políticos dudan del modelo técnico que se utilizará
Jueves 27 de junio de 2013, p. 11
El proceso de redistritación que el Instituto Federal Electoral (IFE) pretende aprobar en octubre ha generado objeciones entre los partidos en su conjunto que cuestionan los plazos para concluirlo y por algunos aspectos técnicos relacionados con la fórmula para integrar la geografía de los 300 nuevos distritos electorales.
Obligado por disposición legal a revisar los distritos electorales cada tres comicios federales, el IFE considera pertinente concluirlo en octubre, tanto por motivos de orden presupuestal –impactar los costos para el ejercicio 2014–, como por la necesidad de aprobarlo antes de que salgan los cuatro consejeros que concluyen su gestión en ese mes, según lo dio a conocer María Marván, quien preside la comisión del Registro Federal de Electores.
Marván explicó que el IFE considera necesario que la actual integración de ese cuerpo apruebe la redistritación por dos razones centrales: la experiencia reciente obliga a considerar la posibilidad de que en noviembre próximo pudiera no estar conformado plenamente el Consejo General, ante la salida, por término de gestión de cuatro consejeros electorales.
En segunda instancia estimó que no sería institucionalmente procedente que los nuevos integrantes del IFE que se incorporen prácticamente al momento de asumir el encargo tengan que votar sobre un tema que es técnicamente muy complejo.
De igual forma dijo que la reconformación de los distritos y los cambios que implicarán en algunos de ellos de entidad, derivado de las modificaciones demográficas que ha registrado el país en los pasado 10 años, tiene un impacto presupuestal. Asumió que algunas juntas distritales tendrán que cambiar de entidad y en algunos casos, implicará también mover los centros de monitoreo de promocionales en radio y televisión, lo cual repercutirá en el presupuesto 2014.
En cualquier caso, señaló que se tienen proyectadas tres revisiones de las propuestas que deriven de la aplicación del modelo técnico que se desarrollará –planteamiento del comité de expertos– y se tiene considerado que los partidos tengan tiempo suficiente para su revisión y plantear sus observaciones.
Sin embargo, de entrada, los partidos aprobaron ya en la Comisión Nacional de Vigilancia, modificaciones en el calendario de cada etapa, porque existe inconformidad en torno a los plazos determinados por el IFE. En reunión de la Comisión Nacional de Vigilancia, con el voto en contra del responsable del Registro Federal de Electores, René Miranda, se avaló este replanteamiento.
Al explicar las razones por las cuales todos los partidos promovieron los cambios, el representante del PRD ante la Comisión Nacional de Vigilancia, Eduardo Ramírez, señaló que existe coincidencia en la necesidad de que se amplíen los plazos y que, en su caso, la conclusión del periodo de gestión del consejero presidente, Leonardo Valdés, no debe ser un factor que acelere un proceso que es muy complejo.
Mencionó que de entrada, algunos partidos tienen dudas sobre el modelo técnico que se aplicará para procesar la redistritación, por lo cual requieren más tiempo para conocerlo, al igual para tratar el análisis de los tres escenarios que, en sucesivas etapas les presentará el IFE.