La despenalización de la mariguana en la ciudad de México derivará en un problema de salud pública, ante la previsible alza en su consumo, principalmente entre adolescentes, advirtieron representantes populares federales y locales. Especialistas consideraron que la criminalización de las drogas anula la libertad y responsabilidad de las personas en aras de políticas autoritarias y conservadoras.

Fernando Cano Valle, comisionado nacional contra las adicciones, afirmó que desde el punto de vista de salud no hay justificación para despenalizar la mariguana, cuyo consumo en México no es grave, y no queremos se agrave con esta medida. Precisó que en los pasados tres años se registró un alza de cuatro puntos porcentuales.

El consumo de alcohol y mariguana “es la entrada de una droga lícita a una ilícita, y nadie que ha probado ambas se queda ahí; empieza a buscar otras más duras, como las anfetaminas, lo cual es grave, sobre todo cuando se tiene un factor de riesgo de 10 por ciento vinculado a drogas y suicidios, que es una cifra enorme”, argumentó.

“No se trata de un asunto de criminalización, sino de un problema social, de educación, social y escolar que demanda toda nuestra atención, cuando tenemos una alza en inhalantes, que  subió de los niños de la calle a nuestros escolares, al ponerles saborizantes. Hoy día, la triada perfecta en el Distrito Federal es mariguana, alcohol e inhalantes, precisó.

El diputado local del PRD Eduardo Santillán ratificó su postura de rechazar la despenalización de la mariguana, porque, sin lugar a dudas, implicaría un aumento sustancial en su consumo, principalmente entre los adolescentes, cuando se observa un aumento de 8.2 a 12.2 por ciento en la reciente encuesta sobre adicciones en estudiantes de secundaria y preparatoria.

Tal situación contrasta con las políticas públicas emprendidas en la ciudad de México para combatir las adicciones, como la Ley de Protección a los No Fumadores y el alcoholímetro, aunque no existe capacidad de atención a personas con estos problemas, por lo que la liberalización de la mariguana colapsaría al sistema de salud, advirtió.

Sin embargo, el especialista en adicciones Gady Zabicky señaló que “el mayor daño que sufren los consumidores de cannabis es caer en manos de la policía, (lo cual es) mucho más nocivo de lo que pueda generar la planta por sí sola. Ser torcido (aprehendido) con una bacha de mariguana en los pantalones es lo que realmente genera un daño irreparable en ese muchacho”.

De acuerdo con las versiones del volumen de Drogas libres: libres de drogas, presentado hace unos días en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, la doctora en Economía María Blanco afirma que las políticas de criminalización de las drogas niegan la capacidad de las personas para tomar decisiones.

Rechazó que su liberalización “implique un aumento irrefrenable del consumo y de las adicciones.