En un mes operarán tres potabilizadoras
Martes 30 de julio de 2013, p. 31
Pachuca, Hgo., 29 de julio.
Los 38 mil habitantes de Zimapán consumen agua cuyas concentraciones de arsénico son 3.5 veces mayores al límite permitido por la norma oficial mexicana (NOM), informó el alcalde Carlos Teodoro Ortiz Rodríguez al anunciar que en un mes empezarán a funcionar tres plantas potabilizadoras que limpiarán el agua de este metaloide, así como de flúor, sílice y hierro.
Según el edil, en esta demarcación, localizada 126 kilómetros al noroeste de Pachuca, existe una alta incidencia de cáncer, enfermedades renales y de piel.
Con una superficie de 144 kilómetros, Zimapán es el ayuntamiento más grande de Hidalgo y en él se asientan seis mineras que explotan plomo y zinc; otras 13 extraen caliza, carbonato de calcio, arcillas y fosforita, según la Secretaría de Economía.
El munícipe dijo que existe un considerable déficit de agua para consumo humano, el cual se palía con tandeos; aun así, 15 por ciento de la población padece escasez.
La capacidad de potabilización de las tres plantas oscila entre 10 y 22 litros por segundo. Las máquinas fueron adquiridas por el ex alcalde perredista José María Lozano, quien en su momento denunció que un tercio de las fuentes subterráneas de agua estaban contaminadas con cantidades de arsénico superiores a lo permitido por normas internacionales (0.025 miligramos por litro).
Un estudio internacional ya había advertido sobre la amenaza que constituyen para los cuerpos de agua de Zimapán los jales (residuos mineros), que contienen concentraciones de arsénico y plomo superiores a las encontradas en Nacozari, Sonora; Santa Bárbara, Chihuahua, y Taxco, Guerrero.
Otro estudio, realizado por el Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México para la Comisión Nacional del Agua, descubrió que el pozo El Muhi, ya clausurado, presentaba concentraciones de 1.22 miligramos de arsénico por litro.