Descalificaciones e insultos, la tónica en las campañas políticas
Domingo 11 de agosto de 2013, p. 20
Buenos Aires, 10 de agosto.
Comenzó esta noche la cuenta regresiva para las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) de este domingo, en las que se definirán las candidaturas de 127 aspirantes a legisladores provinciales, 24 a senadores en siete provincias más esta capital y a concejales en todo el país para los comicios del próximo 27 de octubre.
En cumplimiento de la ley 26-571, que se aprobó en la reforma política de 2009, competirán miembros de una o más listas de precandidatos de una alianza o de un partido, de lo cual surgirán los candidatos con que se presentarán a las legislativas de escala nacional en octubre venidero.
Las primeras PASO se celebraron en 2011 y dejaron varias sorpresas para la oposición, ya que la mandataria Cristina Fernández de Kirchner se impuso entonces con 49 por ciento de los votos, con una diferencia de 30 puntos sobre su más cercano rival opositor. En octubre de 2011 fue relecta, al ganar las presidenciales con casi 55 por ciento de los sufragios.
Para apostar a una candidatura en las próximas legislativas los que disputen estas primarias deberán obtener un mínimo de 1.5 por ciento de votos en el distrito y para la categoría del cargo al que se aspira.
Aunque un partido o agrupación política presente una lista única deberá concurrir a las primarias, que son obligatorias y con estrictas reglas para los votantes que en esta capital suman 2 millones 500 mil.
Todo ciudadano argentino mayor de 18 años podrá sufragar y también los naturalizados o quienes obtuvieron la nacionalidad.
Es optativo el voto para todos aquellos que tengan 16 o 17 años que ya estén en el padrón y lo mismo sucede con los mayores de 70 años, quienes pueden abstenerse.
La campaña política fue extremadamente dura y con golpes bajos, que en su mayoría provinieron de la oposición. Se llegó a límites de acusaciones falsas y desacreditaciones de todo tipo, incluyendo el insulto.
La oposición fue dividida en una serie de alianzas, muchas de ellas increíbles, como es el caso del dirigente de Proyecto Sur, Pino Solanas, que va en estas primarias junto con la abiertamente derechista Elisa Carrió en UNEN; o la diputada Victoria Donda, hija de desaparecidos y representante de la considerada izquierda de Libres del Sur, que aparece junto al economista neoliberal Alfonso Prat Gay, quien pertenecía a la Coalición Cívica de Carrió. Los votantes deberán elegir entre una serie de listas asombrosas.
Esta vez no hubo cierre de campaña como estaba previsto, debido al duelo nacional por la trágica explosión que derrumbó un edificio de 10 pisos en la ciudad de Rosario, lo que hasta ahora ha dejado 14 muertos, una enorme destrucción y unos 60 heridos, mientras se sigue buscando desaparecidos bajo los escombros.
La provincia de Buenos Aires es el eje de las miradas, porque el candidato del Frente para la Victoria, un ex intendente del conurbano, Martín Insaurralde, ha realizado una campaña muy importante en poco tiempo, que lo colocó a la cabeza, junto al principal opositor del Frente Renovador (FR), que lleva como candidato a Sergio Massa, ex jefe de gabinete del gobierno nacional, con el que ahora se enfrenta. Este frente tiene el apoyo de sectores derechistas como Propuesta Republicana, que lidera Mauricio Macri, el alcalde capitalino.
Se estima que el oficialista Frente para la Victoria ganará a escala nacional estas primarias, donde tanto la derceha como la izquierda opositora van muy divididas y con alianzas incomprensibles
desde el punto de vista de analistas locales.