Lunes 12 de agosto de 2013, p. 25
Toms River, Nueva Jersey. Ahora que el número de casos por sobredosis de heroína se ha disparado en Estados Unidos, las fuerzas del orden desempolvan estrictas leyes contra las drogas, rara vez utilizadas; cambian las técnicas de investigación y utilizan la tecnología para procesar a los traficantes por provocar muertes por sobredosis. El drástico cambio en las tácticas llega en un momento en que más personas recurren a la heroína debido a la restricción de los potentes analgésicos opiáceos de receta que los volvió más caros y de difícil acceso. A escala nacional, el número de personas que dijeron haber consumido heroína en el último año se disparó 66 por ciento entre 2007 y 2011, de acuerdo con la Oficina de Abuso de Sustancias y Servicios de Salud Mental. El número de personas que murieron de sobredosis y tenían heroína en su sistema aumentó 55 por ciento de 2000 a 2010, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Vamos a ser implacables
con los distribuidores de heroína, dijo el fiscal José Coronato del condado de Ocean, Nueva Jersey, donde se han reportado 75 muertes por sobredosis este año.