Se requiere un sistema de atención primaria con un médico de cabecera: experto
Medición del Consejo Nacional de Evaluación indica que 15.7% no tiene servicios de salud
Miércoles 28 de agosto de 2013, p. 38
Este 28 de agosto se celebra el Día del Adulto Mayor, en México uno de cada dos están en pobreza y uno de cada 10 vive en pobreza extrema, de acuerdo con la medición de pobreza 2012 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social. Además, señala que 15.7 por ciento no tiene servicios de salud.
Sumado a esto, los adultos mayores sufren violencia: son agredidos física o verbalmente: despojados de sus bienes, ingresos o inmuebles que son utilizados sin su consentimiento o sin tomar en cuenta sus necesidades; padecen maltrato emocional con amenazas y palabras ofensivas; ausencia de expresiones de cariño o respeto, o daño a su identidad y dignidad, refirió Luis Durán Arenas, jefe del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En un comunicado, el experto planteó que México requiere políticas públicas de prevención y cuidado de la salud dirigidas a los adultos mayores, como parte de una estrategia integral que garantice que, en el primer nivel de atención, cada persona cuente con un médico de cabecera. Además de las consultas, este profesional debe brindar orientación para detectar y minimizar riesgos, y promover el autocuidado.
En los servicios estatales de salud no se cuenta con un esquema sólido de atención primaria, y esta población es recibida en hospitales y clínicas que no reúnen las características para tratar y dar seguimiento a las enfermedades crónicas. El esquema muestra sus deficiencias, pues no responde a las necesidades, aseguró.
El especialista consideró que la prevención es una prioridad, ya que si un adulto mayor no recibe atención oportuna, no pueden detectarse riesgos a los que están predispuestos para desarrollar un padecimiento o presentar complicaciones.
En los próximos años, sostuvo, el país enfrenta el reto de establecer un sistema de atención primaria, basado en la figura del médico de cabecera, coordinado con una red de unidades de larga estancia diseñadas para atender a pacientes con enfermedades crónicas. De no hacerlo, las condiciones de injusticia e inequidad se profundizarán y los costos aumentarán
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Antonio Villa Romero, coordinador de Investigación del Departamento de Salud Pública de la misma facultad, indicó que este sector de la población requiere esquemas de cuidados especiales integrados en los programas de las instituciones de salud del país, como parte de un proceso de educación colectivo, para erradicar de la cultura el maltrato y descuido que padecen los ancianos por su condición de fragilidad.