Sábado 31 de agosto de 2013, p. a16
Regina Spektor canta Blood of Eden, mientras Arcade Fire suelta su versión/subersión de Games without frontiers; en tanto, David Byrne pone estilo e idea en la pieza gabrielina titulada I don’t remember, para que llegue un momento sublime: Brian Eno pone su genialidad en una obra maestra: Mother of violence, para volverla sideral, espléndidamente mágica; luego, Randy Newman revisita Big Time; Elbow no se preocupa demasiado por el asunto tema y variaciones
y recurre al pasticcio con Mercy Street; quien sí le entra a la versión creativa es Feist, con Timber Timbre, a partir de Don’t give up; otra cumbre: Lou Reed pone su muro de sonido a Solsbury Hill; Bon Iver hace lo propio con Come talk to me, y la cereza en el pastel: Paul Simon hace suyo otro clásico de clásicos: Biko.
Es el material del nuevo disco de Peter Gabriel: And I’ll Scratch Yours, que saldrá el 23 de septiembre pero ya se pueden escuchar los demos en la página oficial del artista británico, quien a sus 63 años de edad continúa como pivote, guía, autoridad, referente, motor del arte de la música.
And I’ll Scratch Yours culmina una serie intensa, apasionante, que inició hace tres años con un propósito de intercambio, convivencia, reciprocidad: Ráscame la espalda contiene 12 piezas de autores varios, elegidas por Gabriel para cantarlas/decirlas/recitarlas/decantarlas lentamente, acompañado por una orquesta sinfónica, en una atmósfera tenue, suave, íntima, proveniente de la influencia de Arvo Pärt y Steve Reich sobre John Metcalfe, quien realizó las orquestaciones con aciertos tales como poner a dialogar la voz de Peter Gabriel con el oboe en la pieza The drop, o bien hacer lucir la poesía de Paul Simon en Boy in the bubble, en cantilaciones establecidas desde el track inicial: Heroes, la pieza de David Bowie, como un referente a la Low Simphony que escribió Philip Glass en 1996 a partir del disco Low, de David Bowie.
Obras de David Byrne/Brian Eno (Listening Wind), Lou Reed (The Power of the Heart), Regina Spektor (Apres moi), Neil Young (Philadelphia), entre otros autores, completan Ráscame la espalda y ahora esos autores corresponden a Peter Gabriel y le rascan a él la espalda en su disco por venir, And I’ll Scratch Yours, con los materiales enunciados aquí en el primer párrafo.
Hace pocos meses salió también una bella edición conmemorativa por los 25 años del álbum So e incluye, además del disco original, otros dos con material de los conciertos en Atenas, en 1987, donde cimbró la tierra de Pitágoras con versiones inigualables de clásicos como In your eyes, con la bellísima voz de Youssou N’Dour y su extraordinario grupo Les Super Etoiles de Dakar, con sus tambores parlantes (talking drums), su embrujo telúrico y su manera tan contundente de completar una banda de ensueño, entre cuyas filas figuraron Manu Katché y Tony Levin.
New Blood y Live Blood también figuran en la muy reciente, intensa y bella discografía de Saint Peter Gabriel; New Blood es el noveno álbum saintgabrielino de estudio y es el punto de partida de los trabajos con orquesta sinfónica a partir de la revisión de piezas de repertorio y algunas de las incluídas en Ráscame la espalda.
En tanto, Live Blood recoge los conciertos de 23 y 24 de marzo de 2011 en The HMV Hammermith Apollo, de Londres, donde ocurrieron episodios sublimes como el momento en que Peter Gabriel y su hija, Melanie, cantan Wallflower y uno lo escucha como un himno a Dalis: you may disappear/ but you are not forgotten here, mientras suena una cantinela en violonchelo a la manera de Arvo Pärt. Sublime, sencillamente sublime.
Gracias, arcángel Saint Peter Gabriel.