Víctor Manuel Vucetich asumió el reto: en su carácter de Rey Midas, apodo con el que se le conoce en el futbol mexicano, espera convertir la papa caliente que es la selección nacional, en una papa de oro.

En un anuncio que ya se esperaba, el ex técnico del Monterrey fue presentado ayer como nuevo seleccionador, luego de que Luis Fernando Tena sólo estuvo en la derrota ante Honduras.

Vucetich dirigirá los partidos ante Panamá (11 de octubre) y Costa Rica (15) y, en caso de darse, al repechaje frente a Nueva Zelanda. De conseguir el pase a Brasil se analizaría su continuidad.

Fue elegido por su experiencia, dedicación y profesionalismo, y estamos seguros de que nos sacará adelante y llevará a Brasil 2014, expresó el presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Justino Compeán, quien sólo realizó la presentación, dijo muchas gracias y se fue para evadir cuestionamientos en la atiborrada sala de prensa del Centro de Alto Rendimiento.

El experimentado entrenador no evadió las preguntas –admitió que asume las riendas del representativo mexicano, entre otros motivos, porque estaba desempleado– y se mostró insistente en el aspecto mental que ha observado en el equipo.

“En el Tri hay temor a arriesgar, ese es el principal problema. Debemos romper ese esquema. Vamos a trabajar en la táctica, pero sobre todo en el aspecto mental. Partiremos de lo sicológico, de la confianza, de la autoestima; que los jugadores saquen su talento, que no se lo queden”, señaló.

Aseguró que no habrá privilegios en sus convocatorias y que llamará a los que estén comprometidos y en buen nivel físico.

Luego expresó: No importarán jerarquías, nadie estará por encima de lo que es México, tampoco habrá mano dura, pero vamos a ver quién tiene el compromiso para venir y los que están en la mejor forma física. No se trata de gritar ni de imponer, sino que a mi juicio vendrá el mejor jugador en su momento óptimo.

En ese sentido, dijo que contactará a Carlos Vela y a Guillermo Ochoa para saber por qué no han querido acudir al Tricolor, pero en la lista de convocados estarán los que quieran participar.

Al estratega se le recordó que hace tres años rechazó el timón del equipo nacional por motivos personales, pero explicó que ahora las circunstancias son distintas.

“Las situaciones familiares están cubiertas, pero a pesar de eso creo que vale la pena asumir este reto, que es el más importante de mi carrera. Es un gusto, es la culminación de una carrera de 25 años.

Estar aquí es algo que me hacía falta como técnico. El futbol me ha dado mucho y esta es la oportunidad de regresarle algo. A lo mejor será un reto cortitito, pero muy intenso. Vale la pena intentarlo, expresó.

Se trata, abundó, de una situación complicada, pero hay confianza en el jugador mexicano. Eso fue lo que me motivó para asumir este compromiso.

Vucetich dijo estar acostumbrado a este tipo de desafíos y recordó que en su larga trayectoria como entrenador me he jugado el pellejo en cada momento. Cuando ganaba un partido, le decía a mi esposa que la habíamos librado por un mes. Así lo he estado viviendo durante 25 años, día a día.

Su primer convocatoria será el 23 de septiembre, con elementos del balompié local con los que entrenará de lunes a miércoles. La siguiente semana será igual y el 7 de octubre ya trabajará con los que militan en el futbol europeo.

Ante Panamá, en el Azteca

Antes de su apresurada salida de la conferencia, Compeán informó que se mantiene el director general de selecciones nacionales, Héctor González Iñárritu, quien aclaró que nunca he renunciado, no puedo abandonar un barco, e informó que el partido ante Panamá será en el estadio Azteca, pero ya no en horario nocturno, para tratar de aprovechar la altitud y el clima del Distrito Federal.

Aseguró que el cambio lo hacemos libremente, sin la influencia de la televisión, a la que favorecen los partidos por la noche.

El cuerpo técnico del nuevo timonel está integrado por los auxiliares Carlos Barra, Sergio Lugo y Sergio Almaguer, así como el entrenador de porteros Nicolás Navarro, el preparador físico Miguel Ramírez y el terapeuta Carlos Pecanha.