Tras cinco años de ausencia discográfica, Enrique Quezadas regresa con Estas islas, su séptima colección de canciones que lo acerca a la centena de piezas donde su idea del amor parte del respeto propio y del otro, sin azotes, sin revanchismos; reflexiona en torno del mundo, desde un punto de vista verde, ecologista. Todo está relacionado en el amor y en el mundo, aseveró.

“Fueron cinco años de silencio, porque me sumergí en una crisis en la que decidí no hacer canciones hasta tener en claro hacia dónde iba yo a jalar. Mientras, me puse a escribir y acabé dos novelas, que fueron un ejercicio de introspección. A partir de 2012 agarré nueva energía para hacer los textos y saber lo que quería decir, porque reflexioné que no se trata de hacer canciones por hacerlas, o hacer la misma canción otra vez.

Formas novedosas

“De por sí a los compositores nos ocurre que nuestros trabajos se parecen entre sí, y traté de tocar algunos puntos novedosos, tanto en la manera de sonar como en el mensaje intrínseco. Este disco es la salida de la crisis en la que estuve, provocada porque me sentía bloqueado como artista, no en el sentido de que esté culpando a los demás, sino de que los esfuerzos no se ven cristalizados. Uno hace lo posible por salir al paso y el mundo sigue girando. Es saber que cuesta trabajo ser lo que quieres ser, a nivel artístico, y que la gente abra los oídos. Me sumergí en esta especie de estudio de mí mismo y me puse a estudiar sicoterapia; ahora soy sicoterapeuta. Me ha servido estudiar la Gestalt, para saber sobre mi proceso existencial.”

–A todo el mundo le llega, en un momento, su crisis.

–Sí, y a mí me pegó durísimo. Fue muy pesada porque cuando uno está triste puede uno victimizarse, pero traté de hallar cómo uno coadyuva a lo que vive.

Quezadas es compositor, instrumentista y cantante nacido el 15 de julio de 1955. Estudió en el Conservatorio Nacional de Música y en la Escuela Superior de Música, pero empezó a componer canciones hasta los 40 años. A diferencia de la mayoría de los nuevos trovadores o roleros, no se acompaña habitualmente de guitarra, sino de piano y sintetizadores.

Fue miembro de grupos como OnTa, Música y Contracultura (MCC) y Dueto Trilce.

Sus canciones han sido grabadas por Mexicanto, Fernando Delgadillo, Jaime Ades, Betsy Pecanins y Demian Bichir, cuyo disco Fábulas trágicas arregló y produjo.

Ha compuesto bandas musicales y canciones para largometrajes y cortometrajes.

Mucho tiempo tocó puertas y no cejó, y hasta ahora la rueda de la fortuna giró. Me han dado un apoyo a la creación artística, por parte del Conaculta. Es el primero que recibo en 35 años que estoy en la música. Sí, he enfrentado estos olvidos de parte de quienes se dedican a administrar la cultura. Ojalá ya se dieran cuenta de que lo que hacemos varios de nosotros, desde este lado, es perfectamente vendible. Es ir en contra de pensar que la gente es estúpida si compra nuestro trabajo, porque no decimos las mismas tonterías que se oyen en los canales abiertos de televisión, donde sí hay una gran crisis. Si se prende el radio las canciones son monotemáticas; pareciera que no se puede hablar de otra cosa más que de relaciones amorosas, y de éstas de amor fallido, de hacerse la víctima; es una cosa muy estupidizante para la sociedad. Las canciones también educan, no sólo los maestros. La religión educa y otros factores igual. Yo siempre toco puertas y trato de concientizar a la gente. Ahora bien, quienes están en los medios deben de darse cuenta de que no todo es vender.

No sólo hay revanchismo

–¿Qué piensa de los cantautores que son descubiertos por ofrecer falsa poesía?

–Tendríamos que tener un comité que le pusiera tache a Arjona o a José Alfredo, etcétera, porque en gustos se rompen géneros, pero sí creo que la poesía existe y que sí está olvidada en los medios masivos, y que la que tratamos y nos jactamos de hacer los autores de este lado, sí existe y le puede dar a la gente novedad y conciencia de la necesidad de vivir de una manera diferente a lo común, que es muy apretado.

–Una canción da sentido de vida. Salva.

–Así es. A mí me ha pasado que un escucha de mi trabajo me diga que algo de lo que he hecho ha sido importante porque resolvió un problema. En una línea escribí: no te sorprendas de mis ilusiones/ cualquier enamorado ve visiones.

“Esto es para dar algo diferente, porque cuántas veces hemos oído canciones que dicen que yo sin ti no soy nada. ¡Eso no es cierto! ¡Es una estupidez! Y lo siguen diciendo. O canciones en las que nada más hay un reclamo, un revanchismo en donde te haces la víctima, que le dices rata inmunda, de dos patas. ¡Carajo! ¿Cómo le llamas así a alguien con quien te estabas acostando? Es mejor educar. Si voy a hacer una composición de pareja lo primero es que no voy a hacer una canción de ardidos. No me voy a victimizar, ni a insultar a la otra. Quien conoce mi trabajo sabe que soy fiel a esta idea.

“En este disco, Estas islas, incluyo temas dedicados a la Tierra, que es importante sobre todo por lo que está pasando en estos días, por los desastres naturales. En Come frutas y verduras critico a los políticos y a la sociedad que vota por ellos.Los mexicanos tenemos muchos vicios conductuales y la corrupción no nada más está en los gobernantes, sino en todos lados. A los mexicanos les digo que también hay que trabajar hacia adentro. Hay villanos afuera, pero hay uno con el que cada uno carga. Soy un existencialista y creo en el trabajo hacia adentro, para lograr una conciencia de sí.”