n una carta a los medios de difusión taurina y a las autoridades correspondientes, titulada Picador borracho frustra el triunfo de la matadora Hilda Tenorio, el aficionado Fernando Ruiz Paredes, de Yuriria, Guanajuato, dice: “Soy seguidor y admirador de la torera de Morelia, Hilda Tenorio, a quien vi lidiar por primera vez en la plaza de Salvatierra, cuando era casi una niña, impresionándome sus dotes naturales frente a los novillos.

“Como sus partidarios, muchos esperábamos con ansiedad que se le anunciara para torear. No pudimos verla en Salvatierra por el mal estado del piso y suspendieron. Después, anunciada el sábado 28 de septiembre en San Miguel de Allende, con mi familia y otras amistades para allá nos encaminamos. Mal empezó la cosa cuando antes de la hora que se anunció la corrida se soltó la lluvia, retrasándose el comienzo, pero al fin veríamos de nuevo a Hilda.

“Cuando salió al ruedo su primer toro de la ganadería de Arroyo Zarco, al que pusieron Muñeco por nombre, y sí que lo era pues lo vimos que embestía noble y claro, nos mascábamos un faenón de la torera. Era el toro a su medida para un gran triunfo y ya lo estaba consiguiendo con la capa, pero con lo que no contábamos era que el picador en turno, en completo estado de ebriedad, se comportó como un lancero salvaje en lucha encarnizada contra una fiera indomable y casi mató al bello y noble bovino, sin escuchar las órdenes de la matadora que le gritaba desesperada, ni a nadie del ruedo y del callejón, que dejara de castigarlo.

“Ese sujeto, ese borracho que traicionó la confianza de su matadora que lo puso en su cuadrilla, supe que se llama  Ángel Juárez. Y comprobé personalmente su lamentable y vergonzoso estado, ya que siguió bebiendo en el patio cercano a la capilla de la plaza y de puerta de cuadrillas.

“Yo veo que cada vez a la gente le interesa menos la tauromaquia, que no va a las corridas, que hay muchas campañas en su contra, y a los que nos gusta quisiéramos ver valientes y profesionales íntegros, pero este tipo de acciones abusivas dan armas a los enemigos.

Ha sido una afrenta para la torera, para el ganadero, para la plaza y para el público, que verdaderamente se indignó y repudió la acción del ebrio, que debería reparar el daño cuando menos restituyendo a la matadora otro toro de esa calidad. Los que fuimos testigos pedimos que no quede ignorado y sin la debida reprimenda este detestable suceso. Cuento con el testimonio y firma de un número importante de personas, concluye Fernando Ruiz Paredes.

En la cuerda de Ignacio Sánchez Mejías y de Domingo Ortega, esclarecidos toreros-conferenciantes, el enrachado matador de toros hidrocálido Arturo Macías impartió el pasado miércoles en el restaurante El Burladero, de su natal Aguascalientes, la interesante charla El sueño de ser torero, ante aficionados de cepa, ganaderos, médicos taurinos, alumnos de las escuelas taurinas y jóvenes aficionados.

Macías agradeció la buena respuesta al evento y habló de cómo se inició su sueño de ser torero, los esfuerzos y el deseo enorme que lo hizo sobreponerse a los obstáculos y sus primeros pasos en la fiesta brava. Recordó la tarde que le cambió la vida, el 21 de mayo de 2006, ante el bravo toro Don Palillo de Barralva, al que le cortó las orejas en aquella feria torista de la Plaza México, tarde a la que define como el cuento de la cenicienta, y cómo aquel joven que sólo tenía un sueño ese día lo volvió realidad.

Relató las sensaciones que ha experimentado al salir por la puerta grande de la México en siete tardes. Recordó también el sufrimiento y el carácter que le han forjado las graves cornadas que han puesto su vida en riesgo, su paso por España y la temporada de 2010, en la que apostó el todo por el todo y la experiencia que ésta le dejó, pues ello le ha convertido en el torero que ahora es. Hizo énfasis en el aprendizaje y la satisfacción que le da estar en plazas de primera y en pisar también los ruedos de los rincones más lejanos de México.

Macías dialogó con los asistentes respecto de su futura comparecencia en la Plaza México y se mostró ilusionado por volver a la plaza de sus victorias el próximo 17 de noviembre, encabezando un cartel de mexicanos al lado de Fermín Rivera y Juan Pablo Sánchez con toros de Marrón. Agregó que este año ha sido uno de los mejores de su carrera gracias al buen momento que vive tanto personal como profesionalmente y a formar una mancuerna extraordinaria con su apoderado, el matador Fermín Espinosa Armillita. Este 2013 Arturo Macías ha sumado un total de 34 corridas, 58 orejas, cinco rabos y un indulto que lo posicionan a la cabeza del escalafón taurino mexicano.