Las Vegas, 11 de octubre.

Juan Manuel Márquez y el estadunidense Timothy Bradley cumplieron con la báscula, para la pelea de este sábado por el título mundial wélter en el Thomas and Mack Center, en la que el Dinamita buscará convertirse en el primer mexicano en conquistar cinco títulos mundiales en divisiones distintas.

En la ceremonia de pesaje, realizada en el teatro Encore del hotel casino Wynn, el retador Márquez registró 144.5 libras, mientras el campeón Bradley dio 146 libras, con la supervisión de la Comisión Atlética de Nevada.

Me preparé bien y estoy listo para cualquier estilo que él quiera pelear, dijo el capitalino, quien explicó que durante sus entrenamientos boxeó con “tres sparrings de diferentes estilos, así que no me afectará la manera en la que él quiera boxear”.

Los mexicanos fueron mayoría en la ceremonia y aplaudieron a su compatriota, mientras abuchearon al campeón de la Organización Mundial de Boxeo, quien se mostró sereno y pidió a los fanáticos que le silbaran más.

Disfruto todo esto, dénme más, dijo Bradley, quien mostró una musculatura de fisicoculturista: Voy a dar un gran espectáculo, agregó sonriente.

Por su parte, Ignacio Beristáin indicó que su pupilo subirá al momento de la contienda con un peso de entre 149 y 150 libras: Viene fuerte y está muy tranquilo de lo que va a hacer.

Márquez ha ostentado los cinturones mundiales de peso pluma, superpluma, ligero y superligero, y ahora intentará convertirse en pentacampeón mundial con su pegada, experiencia, contragolpeo y presión sobre sus oponentes.

El pugilista tiene 40 años, pero atraviesa por un gran momento de su carrera, tras noquear a Manny Pacquiao en diciembre pasado.

Márquez es uno de cinco peleadores –los otros son Miguel Cotto, Shane Mosley, Ricky Hatton, Oscar de la Hoya– que han enfrentado tanto a Floyd Mayweather Jr., como a Pacquiao, pero es el único que ha podido vencer al filipino.