Sao Paulo, 15 de octubre.

El mayor grupo del crimen organizado de Brasil, Primer Comando de la Capital (PCC), planea atentados durante la Copa del Mundo de 2014, en un plan denominado Mundial del Terror, según aseguró el diario O Estado de Sao Paulo.

De acuerdo con el rotativo, así lo informó la semana pasada un fiscal que tuvo acceso a reportes de la inteligencia policial.

El grupo sabe que tendremos mucho turistas durante la justa, constató el fiscal, cuyo nombre no fue divulgado, y además alertó al Gabinete de Gestión Integrada del Comando del Ejército de la región Sudeste, que abarca los estados Espíritu Santo, Minas Gerais, Río de Janeiro y Sao Paulo.

Al ser informado sobre el plan, el comandante general de la Policía Militarizada de Sao Paulo, Benedito Roberto Meira, dijo que la corporación está en estado de alerta: Envié un mensaje a mis hombres para que redoblen la atención durante la recepción de denuncias, cuando estacionan vehículos y en el camino de regreso a sus casas.

Las indicaciones de Meira tienen que ver con la modalidad adoptada por el grupo en 2006, cuando a raíz del traslado de algunos de sus líderes a prisiones de máxima seguridad perpetró decenas de atentados contra patrulleros, autobuses y comisarías, que esparcieron el miedo y paralizaron durante varios días la ciudad de Sao Paulo.

En 2012, por la misma causa, el grupo realizó varios atentados contra policías que, según la corporación, derivó en la muerte de 106 agentes.

La presente amenaza también está relacionada con el posible traslado de los principales líderes del grupo a la cárcel de máxima seguridad de Presidente Bernardes, en el interior de Sao Paulo.

De acuerdo con escuchas telefónicas realizadas por la inteligencia policial, el PCC, que actúa desde dentro de las cárceles, pretende sabotear el Mundial y las elecciones presidenciales, en caso de que sus principales líderes sean transferidos a dicho penal, como fue solicitado por el Ministerio Público de Sao Paulo.

En esa cárcel los presos estarán sometidos al Régimen Disciplinario Diferenciado (RDD), en el cual permanecen aislados y con menos beneficios que los reos comunes.

De acuerdo con la información obtenida, los líderes del grupo ya envían instrucciones desde las prisiones a sus cómplices sobre cómo actuar en caso de ser trasladados.

El clima está muy tenso en la región. Ellos trasmitiendo órdenes por sus celulares porque quieren que sepamos, dijo uno de los 23 fiscales del Grupo de Actuación Especial y Represión al Crimen Organizado (Gaecos) de Sao Paulo, el cual investiga desde hace tres años ese delito en todo el país.

Se amenaza también con realizar una huelga blanca para impedir el ingreso de nuevos presos a las cárceles y que sean encerrados en celdas, a fin de que permanezcan libres en los patios.