El dirigente del PAN, Gustavo Madero, rechazó ayer que su partido tenga una alianza con el PRI para la reforma energética y que haya establecido contratos secretos con empresas privadas.

De gira por Durango, insistió en que la propuesta del PRI no es satisfactoria, porque no resuelve los problemas del sector ni aprovecha las oportunidades que tiene el país.

Según Madero, la iniciativa que presentó su partido es la que México necesita para crecer y detonar un motor potente de la economía que ha estado subutilizado y mal administrado.

Reiteró que en la actualidad se importa 40 por ciento de las gasolinas, 40 por ciento de los fertilizantes y 40 por ciento del gas natural. Si hacemos algunos cambios en la legislación, como los que propone el PAN, el país tiene oportunidades.

Madero Muñoz rechazó que la reforma política que se discute en el Congreso vaya a ser moneda de cambio para que el PAN apoye la reforma energética, e insistió en que la primera debe aprobarse antes que la otra.

Resaltó que así fue acordado en el Pacto por México al pedir que los actores que suscribieron el mecanismo se apeguen y respeten este orden de prelación.

Consideró que debe cambiar el diseño de la legislación política pues favorece, privilegia y sobrerrepresenta al PRI, en detrimento de otros partidos.

En tanto, el dirigente del PRD, Jesús Zambrano, informó que se comunicó vía telefónica con Gustavo Madero, y éste nego que su partido tenga un acuerdo con el gobierno federal en lo que se refiere a la reforma energética.