Nuevo escándalo que se suma a casos de drogas y un comandante despedido por borracho
Se trata de un comportamiento inaceptable
, advierte la secretaria de la Fuerza Aérea
Viernes 17 de enero de 2014, p. 28
Washington, 16 de enero.
En un revés para el sector a cargo de los cohetes nucleares que ha estado plagado de traspiés y fallas de liderazgo, la Fuerza Aérea reveló que 34 oficiales a cargo del lanzamiento de los cohetes más mortíferos del mundo fueron removidos de sus cargos porque presuntamente hicieron trampa, o toleraron que otros lo hicieran, en las pruebas de aptitud.
Este escándalo es el más reciente episodio de una serie de traspiés en el sector de armas nucleares de la Fuerza Aérea documentados en meses recientes por la agencia The Associated Press, que incluyen violaciones a las normas de seguridad, fallas en las inspecciones, incapacidad en los entrenamientos y evidencia de que los hombres y las mujeres que operan los misiles en puestos de comando subterráneo sufren de agotamiento.
En octubre, el comandante de la fuerza de misiles nucleares fue despedido por haber tenido un comportamiento embarazoso, al estar borracho mientras encabezaba una delegación estadunidense para ejercicios nucleares en Rusia.
Estoy profundamente decepcionada
, destacó Deborah Lee James, secretaria de la Fuerza Aérea, principal funcionaria civil del servicio, en una conferencia de prensa convocada en el último minuto del miércoles, cuando informó que la presunta trampa en la base aérea Malstrom, de Montana, fue descubierta durante la más reciente investigación en que 11 oficiales resultaron involucrados en posesión de drogas en varias bases de la Fuerza Aérea, incluidos dos elementos que están en la fuerza nuclear y son sospechosos de haber participado en la serie de trampas.
Este es un comportamiento absolutamente inaceptable
, advirtió James sobre las trampas. El general Mark Welsh, comandante de la Fuerza Aérea, dijo que se podría tratar del peor escándalo en la historia de las fuerzas misileras.
Un vocero de Chuck Hagel, secretario de Defensa, dijo que el jefe del Pentágono, quien visitó la base de misiles nucleares la semana pasada y elogió a la tropa por su profesionalismo, estaba profundamente preocupado
por las acusaciones. El portavoz, vicealmirante John Kirby, dijo que Hagel pidió que se le mantenga informado sobre el progreso de las investigaciones.
Al parecer, los oficiales acusados de hacer trampa se enviaron mensajes de texto con las respuestas de una prueba mensual acerca de su conocimiento sobre cómo operar los misiles. Es posible que otros se hayan enterado de que esto ocurría, pero no lo denunciaron.
El engaño fue descubierto durante una investigación de drogas que involucra a 11 oficiales de la Fuerza Aérea en seis bases en Estados Unidos e Inglaterra.
De los tres oficiales del sector de lanzamiento de misiles involucrados en el escándalo de drogas, dos están en la base aérea de Malmstrom, en Montana, y uno está en la base aérea Warren en Wyoming. Los dos en Malmstrom también están implicados en el escándalo por hacer trampa.
Se trata de la más reciente controversia que involucra a elementos del servicio que mantiene y opera los 450 misiles nucleares del país.
El senador demócrata Mark Udall, de Colorado, instó a los líderes de la Fuerza Aérea a que apliquen drásticas medidas para asegurar la integridad del sector.
James, que ocupa el cargo desde hace sólo cuatro semanas, aseguró que toda la fuerza a cargo de los misiles nucleares es de 600 efectivos y todos serán sometidos a una nueva prueba esta semana.