Madrid, 17 de enero.

El presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, aseguró que es imposible dialogar con los dirigentes de Cataluña que mantienen abierta la estrategia para celebrar una consulta ciudadana sobre una eventual independencia de la región del Estado español.

El mandatario advirtió que, de continuar con ese proceso en favor de la soberanía y la autodeterminación, corren el riesgo de sufrir un empobrecimiento de incalculables proporciones.

Un día después que el Parlamento de Cataluña aprobó por amplia mayoría solicitar al gobierno español los poderes para celebrar un referendo o consulta ciudadana sobre la situación actual del modelo territorial y político, Rajoy reiteró en conferencia de prensa que no habrá diálogo.

Esta ha sido la estrategia de Rajoy desde que Cataluña comenzó su camino hacia la independencia, tras el reiterado rechazo del mandatario español a dialogar y encontrar puntos de encuentro con las autoridades catalanas, que a su vez reclaman un nuevo estatuto y un nuevo marco de financiamiento que les permita reducir el déficit que tienen con España.

Fiel a su estilo, Rajoy enfrió cualquier tipo de encuentro o diálogo con sus interlocutores catalanes: Siempre estoy abierto al diálogo, es mi natural forma de ser. Lo que ocurre es que se están tomando decisiones sin avisar a nadie. Lo que veo desde aquí, como presidente del gobierno, es un continuo proceso de toma de decisiones unilaterales, a así es imposible dialogar.

Asimismo lanzó un ataque contra el proceso y sus supuestos efectos en la economía catalana, al hacer una analogía con el proceso escocés: Si se independizara, Escocia quedaría fuera de la Unión Europea, de Naciones Unidas, de todos los tratados internacionales firmados por Gran Bretaña, y si estuviera en el euro, que no lo está, quedaría fuera del euro y sin el amparo del Banco Central Europeo. Es decir, los territorios que optaran por la independencia sufrirían un empobrecimiento de incalculables proporciones. Afectaría a todas las personas que vivieran en esas regiones. Eso es información, no opinión, expresó Mariano Rajoy.