La Habana, 18 de enero.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pidieron este sábado apoyo mundial para exigir la libertad inmediata de su dirigente, Simón Trinidad, preso desde hace 10 años en Estados Unidos, al reanudarse en La Habana el diálogo de paz con Bogotá.

Es un SOS a todas las organizaciones defensoras de los derechos humanos, a juristas y expertos en derecho internacional humanitario, a agrupaciones políticas y sociales de los cinco continentes y a organismos internacionales, entre ellos la Organización de Naciones Unidas, dijo Iván Márquez, jefe de la delegación insurgente en las pláticas de paz.

Demandó al Comité Internacional de la Cruz Roja realizar una visita humanitaria a Simón Trinidad en la prisión de Florence, Colorado, donde se encuentra confinado para cumplir una condena de 60 años, inculpado por el secuestro de tres ciudadanos estadunidenses en Colombia.

A las autoridades estadunidenses, Márquez reclamó “mejorar las condiciones de reclusión. No sólo está sepultado vivo. Su incomunicación es total, no tiene asistencia médica adecuada, le quitaron las gafas y siempre es conducido encadenado a las audiencias, denunció Márquez, quien reiteró el pedido de que Trinidad se incorpore a las negociaciones.

Instamos al gobierno colombiano a que posibilite a Trinidad intercambiar con sus compañeros en La Habana, expresó.

Tras dos días de trabajo por separado, las delegaciones de las FARC y del gobierno de Juan Manuel Santos se encontraron hoy para continuar los diálogos.

En las pláticas, la guerrilla y el gobierno alcanzaron acuerdos en dos de seis puntos: el problema agrario y la participación política. Quedan pendientes el abandono de las armas, la reparación de daños y la forma de refrendar un eventual acuerdo.