Saltillo, Coah., 22 de enero.

El énfasis del gobierno federal en la extracción de gas de lutita (también llamado shale o de esquisto) pone en riesgo comunidades enteras, entre ellas las de la zona carbonífera de Coahuila, que se podría convertir en una región fanstasma debido a que el precio del carbón disminuirá, advirtió Horacio Cárdenas Zardoni, economista, profesor e investigador de la Universidad Autónoma de Coahuila (Uadec).

Ahora vamos a sacar gas y el carbón ahí se va a quedar, pero eso va a romper la cadena productiva y económica de la región, dijo el especialista al presentar el libro Cultura del carbón, que escribió junto con Federico Müller Rodríguez, director de la Facultad de Economía de la Uadec. Ambos exponen que la extracción de carbón siempre ha quedado relegada en las políticas públicas, lo que ha impedido introducir tecnologías más modernas, mejorar las condiciones laborales y salariales de los carboneros y aminorar el impacto ambiental de esta actividad.

La explotación del gas reclama grandes inversiones que el país no puede hacer; por ello se estará echando mano de capitales extranjeros que vendrán a extraer el gas ocupando mano de obra regional, pero a precios mucho muy baratos, advirtió.

Por separado, el economista Federico Müller Rodríguez aseguró que para el gobierno mexicano la región carbonífera de Coahuila no es prioritaria, pese a la riqueza que genera la explotación de este mineral.

Señaló que unos 6 mil mineros laboran en los innumerables pozos de carbón sin seguridad ni prestaciones sociales.

La población residente no se ve beneficiada. Mientras a los mineros de los pozos les pagan 100 o 120 pesos por cada tonelada de carbón que extraen, sus patrones la venden a 900 pesos a la Comisión Federal de Electricidad, que la ocupa como materia prima en sus dos plantas carboeléctricas instaladas en el municipio de Nava (en el norte de Coahuila), expuso.

Hay una utilidad de al menos 800 por ciento. De ese tamaño es la explotación de los trabajadores, denunció Müller.

Según Cárdenas Zardoni, hay indicios de que el gobierno mexicano pretende transformar las plantas eléctricas de Nava para que usen gas de esquisto en lugar de carbón.

En el libro Cultura del carbón, editado por la Uadec, los autores hacen un repaso de la relación que ha tenido la minería con la historia de Coahuila, el desarrollo de la cuenca carbonífera y la muerte de trabajadores que ha sido una constante en esta actividad económica.