Un total de 20 sucursales de las cadenas de supermercados Walmart, Aliser y Piticó, de las tiendas de conveniencia Oxxo, Smart y Extra, así como veterinarias y tiendas de mascotas denominadas Veterinaria y Libramiento, Maskota y Veterinaria Richard, ubicadas en ciudades fronterizas del norte y sur del país, fueron sancionadas por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por no exhibir ni respetar los precios de alimentos y bebidas.

La mayoría de los negocios sancionados se concentran en los estados de Chihuahua (seis casos) y Chiapas (tres). La dependencia informó además que los establecimientos de abarrotes, almacenes y tiendas Aliser, en Baja California Sur, se negaron a ser verificados.

Añadió que este fin de semana su personal verificó en 100 negocios los precios de diversos productos, desde los que se incluyen en la canasta básica como alimentos y bebidas con alto contenido calórico, que a partir de este año son sujetos de nuevos impuestos (un peso por litro de refresco o bebida azucarada) así como una tasa de 8 por ciento del impuesto especial para producción y servicios (IEPS) en diversos alimentos industrializados.

A ello se agrega la homologación del impuesto al valor agregado (IVA), por lo que a partir del primero de enero los habitantes de la frontera están obligados a pagar una tasa de 16 por ciento, como en el resto del país, en lugar del 11 por ciento del que gozaron por varios años.

Según Profeco, el operativo en las zonas fronterizas arrancó desde el comienzo del año, pero apenas ayer emitió el primer reporte sobre el particular.

La dependencia refirió que Pedro Luis Benítez Vélez, encargado del despacho, advirtió que continuarán los operativos en las zonas fronterizas para evitar una escalada de precios.