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Recibe amparo indígena tzeltal detenido y encarcelado injustamente

Ejidatarios desplazados de Chenalhó sufren amenazas al cosechar cafetales
Enviado
Periódico La Jornada
Lunes 27 de enero de 2014, p. 19

San Cristóbal de las Casas, Chis., 26 de enero.

Representantes de los desplazados del ejido Puebla, en Chenalhó, que este lunes cumplen 10 días cosechando los cafetales que habían dejado atrás en agosto pasado, anunciaron que volverán a refugiarse en el campamento de Las Abejas en Acteal, donde han permanecido durante seis meses, pues aún no existen condiciones para su retorno definitivo y el gobierno estatal no ha cumplido las exigencias de los indígenas, manifestó hoy Nicolás Cruz Pérez.

Durante el tiempo que hemos estado en el corte de café hemos recibido amenazas y agresiones, tenemos una lista de estos hechos, haciendo del conocimiento del Ministerio Público (que mandó el gobierno del 17 al 27 de enero) las amenazas y agresiones, mismas que le dieron a conocer al gobernador Manuel Velasco Coello el día 22 en su visita a nuestro ejido, agregaron los indígenas, que insisten en un retorno digno y justo.

Las demandas de las familias, desplazadas por la violencia de un grupo oficialista de la comunidad son: reparación de daños (robos, daño a la propiedad y los cultivos), restitución de la ermita enajenada por las autoridades ejidales y aplicación de la ley para los numerosos delitos cometidos por el grupo mencionado.

En los días que han permanecido en el ejido, los desplazados han recibido continuos insultos y amenazas de los mismos que los despojaron de la ermita.

En otro orden, se informó que el campesino tzeltal Antonio Estrada Estrada, de San Sebastián Bachajón (Chilón), recibió un amparo que abre paso a su absolución definitiva. Excarcelado el pasado 24 de diciembre, hasta ahora no ha sido completa su libertad.

El gobierno estatal liberó a Estrada, adherente de la Sexta declaración de la selva Lacandona, después de haber sido detenido ilegalmente, torturado y privado injustamente de su libertad por más de dos años. Al dejar la cárcel en Playas de Catazajá aún pesaban sobre él acusaciones, aunque infundadas, del orden federal. Por tal motivo sigue yendo a firmar periódicamente en un juzgado de la capital del estado.

El abogado Ricardo Lagunes Gasca, representante legal de los ejidatarios, detalla que su liberación fue mediante un beneficio de ley otorgado por el gobierno de Chiapas. Sin embargo, Antonio no recobró legalmente su inocencia, además de que aún enfrenta un proceso federal ante el juez sexto de distrito en Tuxtla Gutiérrez. Dicho proceso se deriva del mismo asunto por el cual fue sentenciado a más de siete años; ahora se añade la imputación de portar arma de uso exclusivo del Ejército.

El viernes 24 de enero, agregó el defensor, el tercer tribunal colegiado en Tuxtla Gutiérrez publicó la resolución dictada en el amparo directo interpuesto por Estrada en septiembre de 2013, para impugnar la sentencia de más de siete años de prisión dictada por el juez de primera instancia de Playas de Catazajá, por los presuntos delitos de asalto y delincuencia organizada imputados por policías especializados de la Procuraduría General de Justicia del Estado.

En su sentencia, el tribunal federal concedió la razón al indígena por las violaciones a sus derechos humanos y le otorgó el amparo liso y llano, lo que tiene como efecto su completa absolución de los hechos por los cuales permaneció más de dos años injustamente preso.

Con la resolución se abren las puertas para que el juez sexto de distrito en Tuxtla Gutiérrez le otorgué la libertad absoluta a Antonio Estrada Estrada dentro del proceso penal federal que se ventila en dicho órgano jurisdiccional, y finalmente recobre su completa libertad legal, concluyó el abogado.