El gobierno deberá comprárselas o dotarlas de otras que sean permitidas, afirma
Miércoles 29 de enero de 2014, p. 13
El principal problema que tendrá el gobierno federal para incorporar a integrantes de los grupos de autodefensa de Michoacán a cuerpos de defensa rurales es el armamento, aseguró el general de división retirado Luis Garfias Magaña, quien precisó que todo civil que porte armas de uso exclusivo del Ejército viola la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
Ante la negativa de las autodefensas de entregar sus armas de grueso calibre a la autoridad, el gobierno tendrá que ingeniárselas
para comprárselas o cambiárselas por otras que sí puedan utilizar sin violar la ley.
En entrevista, Garfias Magaña advirtió que si el gobierno actúa inteligentemente y las guardias rurales se apegan a la ley, podrían servir como un modelo a seguir en otros estados donde la violencia está desbordada, como son Guerrero y Tamaulipas.
Este proceso no será sencillo: se necesitarán armas, uniformes, adiestramiento y, sobre todo, recuperar la confianza entre las comunidades y las autoridades (civiles y militares) para restructurar este modelo de seguridad que en su momento dio buenos resultados.
Sin embargo, subrayó, el problema que veo es que muchos en Michoacán tienen armas de alto calibre, como AK-47 y AR-15, que el Ejército no puede registrar porque son de uso exclusivo de las fuerzas armadas, y quien tenga una comete un delito federal
.
Se tiene que lograr un entendimiento entre las autoridades y las autodefensas para que entreguen o vendan sus armas a la autoridad, porque de lo contrario va a ser muy difícil que los acuerdos se cumplan.
Si aceptan, habrá que darles armas y dinero, adiestrarlos para que sean una fuerza paramilitar, porque quedarán adscritas a las zonas militares en que están ubicadas sus comunidades
.
Además, quien se incorpore a las guardias rurales deberá entender que tendrá derechos y obligaciones como cualquier militar. Nada de que deserto y me voy o me pongo en huelga; hay cosas que se castigan, como la deserción y el mal uso de las armas que reciban
, indicó.
Precisó que en todo caso el Ejército estaría en condiciones de armar los cuerpos de defensa rurales con armas que no violen la ley o incluso que registren pistolas o rifles de su propiedad, pero siempre y cuando, no superen el calibre autorizado.
Recordó que los cuerpos de defensa rurales, jugaron un papel importante durante la época agrarista y en la guerra cristera, pero con el paso del tiempo fueron perdiendo importancia.