Washington, 31 de marzo.

La Agencia Central de Inteligencia (CIA) engañó al Congreso y al público sobre aspectos de su brutal programa de interrogatorios y ocultó detalles sobre la severidad de sus métodos durante años, se establece en un informe del Senado.

Las conclusiones publicadas por The Washington Post en su versión electrónica, sostienen que la agencia atribuyó información de inteligencia a las técnicas de tortura cuando en realidad la había obtenido antes de los interrogatorios.

Un funcionario anónimo citado por el diario dijo que la CIA argumentaba obtener información única que no podía obtenerse de otra manera para desmantelar planes terroristas y salvar miles de vidas.

Dicha explicación fue dada al Departamento de Justicia y eventualmente al Congreso. ¿Era verdad? La respuesta es no, señaló la fuente en declaraciones al diario.

El reporte revela lo que funcionarios describieron como la existencia de una red secreta de sitios de detención de sospechosos de terrorismo desmantelada por el presidente Barack Obama en 2009.

Empleados perturbados

Indica que empleados de la CIA abandonaron una prisión secreta después de declararse perturbados por las medidas empleadas contra los prisioneros.

Funcionarios citados por Ap indicaron que el reporte señala que la información que llevó a la caza del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden no se obtuvo mediante torturas.

El hallazgo podría agudizar la controversia entre los congresistas y la CIA.

La CIA está enfrascada en una disputa con el Comité de Inteligencia del Senado debido a denuncias de que la agencia espió a los congresistas.

Para este jueves está programada una votación en que se decidirá si el resumen del reporte podrá ser divulgado al público.

La ofensiva contra el terrorismo impulsada tras el 11-S incluyó además que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) espiara masivamente a través de Internet, lo que fue revelado el año pasado por el ex contratista de esa agencia Edward Snowden, asilado ahora en Rusia.

Un grupo de profesores de varias universidades encontró que la empresa pionera de seguridad RSA adoptó no sólo una sino dos herramientas de encriptación desarrolladas por la NSA, aumentando la capacidad de espionaje de la agencia en Internet.