Seúl, 31 de marzo.

Corea del Norte y Corea del Sur dispararon hoy centenares de proyectiles de artillería en aguas territoriales de cada una, al repuntar la animosidad que obligó a los residentes de cinco islas sudcoreanas a acudir a los refugios durante varias horas.

El detonante fue un ejercicio de tiro de la artillería costera norcoreana. Según el ministerio sudcoreano de Defensa, más de 100 de las 500 granadas lanzadas acabaron en aguas sudcoreanas.

Corea del Sur respondió y más de 300 proyectiles cayeron en aguas norcoreanas. Seúl acusó a Pyongyang de una provocación calculada.

El ministerio sudcoreano de Defensa no descartó que su vecino del norte quisiera poner a prueba la disposición de las fuerzas de Seúl.

Los habitantes de las islas sudcoreanas de Baengyeong y Yeonpyeong recibieron la consigna de ir a refugios, precisó un funcionario local.

El intercambio ocurre después de que el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas condenó a Pyongyang por lanzar misiles de rango medio la semana pasada, y en momentos en que los líderes de Corea del Sur, Japón y Estados Unidos se reúnen para discutir el programa de armas de Corea del Norte.

Estados Unidos calificó las acciones de Norcore de peligrosas y provocadoras, y agregó que empeorarán las tensiones en la región.

Rusia expresó su preocupación por la renovada tensión en la península coreana y pidió a ambas partes moderación.

China también manifestó su preocupación e instó a todas las partes a que se mantengan en calma, se contengan y se abstengan de realizar acciones contra la paz y la estabilidad en la península, manifestó en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores.