Además de que el precio de la tonelada de maíz desde el año pasado ha disminuido 45 por ciento, existen relaciones de comercialización injustas y especulativas, que merman nuestras cosechas y nos castigan los precios por toda la red de intermediarios que hay, señaló Héctor Salazar Arriaga, presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México (CNPAMM). En entrevista, indicó que ante esta situación urge que el gobierno federal, por conducto de la Secretaría de Economía, intervenga, ponga orden y verifique básculas en las bodegas, pues indicó que en muchas ocasiones no pesan adecuadamente el producto, siempre en favor de los bodegueros, quienes les quitan peso y precio. Apuntó que llegan con toneladas y les dicen que son 900 kilos y se las pagan como tal, o bien les dicen que hay exceso de humedad en el grano, cuando no es así.