Ratificar el Protocolo de la Organización de Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas no es suficiente, aseguró Antonio Mazzitelli, representante de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito. Además de prevenir ese ilícito y sancionar a los responsables, los gobiernos deben ‘‘resarcir” a las víctimas y darles la oportunidad de reconstruir sus vidas.

‘‘Por parte de Naciones Unidas el máximo compromiso no sólo es respaldar el protocolo, el cual en menos de cinco años ha obtenido una ratificación casi universal (159 estados), sino también acompañar a las instituciones para tener respuestas no solo represivas, como poner en la cárcel y hacer pagar a los victimarios, sino ofrecer a las víctimas un ‘‘resarcimiento’’, una segunda oportunidad’’, precisó.

Al participar como invitado en la entrega de la Paloma de Plata a Rosi Orozco, presidenta de la asociación civil Unidos contra la Trata, el funcionario de la ONU refirió que la trata de personas ‘‘es un holocausto que se perpetúa cada día, que no tiene final; son miles y miles de historias, desafortunadamente todas iguales, que empiezan con el amor como señuelo, el engaño, y después siguen con la violencia, la explotación y con la desesperación y el miedo’’.

Luis García, primer visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), expuso que la trata de personas es un ilícito ‘‘indignante’’ y acotó que esta ‘‘repugnante forma de delincuencia atenta gravemente contra la vida, libertad, integridad y dignidad’’ de las personas de cualquier país.

‘‘Cerrar los ojos a esta realidad no sólo es ética y políticamente irresponsable; si lo hacemos nos convierte en cómplices de una de las situaciones más dañinas para la dignidad humana que prevalece en México y muchas regiones del mundo.”

Dijo que según cifras divulgadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), en México de 16 mil a 20 mil niñas, niños y adolescentes son sometidos a ‘‘esclavitud sexual’’ y acotó que incluso ‘‘algunas fuentes calculan que esta cifra asciende a 70 mil, de los cuales 50 mil son explotados en ciudades fronterizas y 20 mil en el resto del país”.

Apuntó que se deben seguir ‘‘articulando esfuerzos institucionales’’ y de la sociedad civil, pues advirtió que pese a la reforma a la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas, persisten ‘‘actitudes y conductas’’ que impiden erradicar la trata.

Por su parte, Eruviel Ávila Villegas, gobernador del estado de México, resaltó que en su entidad se han cerrado ‘‘728 giros negros donde los delincuentes llevan a cabo este delito (...) Voy a estar firme recibiendo orientaciones de todos. En mí tienen a un aliado’’, precisó el mandatario estatal ante integrante de agrupaciones civiles que combaten la trata.