El mercado de valores del país se convirtió en refugio inmediato para la inversión de capitales, luego de la baja de medio punto porcentual en las tasas de interés determinada el pasado viernes por el Banco de México (BdeM). La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) arrancó la semana con una ganancia de apenas 0.54 por ciento, aunque suficiente para que su principal indicador, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), pudiera rebasar 43 mil puntos, nivel que no se veía en los últimos 14 meses.

La subida del mercado se registró en momentos en que los analistas consideran que las acciones registradas se encuentran sobrevaloradas y su precio no corresponde con las utilidades generadas por las empresas.

De acuerdo con el más reciente reporte enviado al BdeM por la BMV, en abril pasado el valor de las acciones en circulación se ubicaba en 6 billones 521 mil 33.7 millones de pesos. Al parecer ese valor se sustenta por la demanda de títulos generada por inversionistas extranjeros cuya participación (también en abril pasado) se ubicó en 162 mil 878.7 millones de dólares. Sólo entre marzo y abril se registró un flujo de mil 810.9 millones de dólares al mercado de valores de México.

Expertos del grupo financiero Banorte-Ixe mencionaron que “el apetito por activos bursátiles se incrementó por la decisión del Banco Central Europeo y por un sólido dato de empleo en Estados Unidos, llevando el (índice) Standard and Poor’s 500 a un nuevo máximo. Para el IPC el recorte (de tasas) del BdeM fue un elemento más de impulso”.

Efectivamente, ayer el mercado reaccionó favorablemente con una jornada desarrollada siempre en terreno positivo que elevó el indicador hasta un máximo de 43 mil 175.77 puntos, aunque finalmente concluyó en un nivel de 43 mil 9.99 unidades, equivalente a un avance de 9.54 por ciento. El último antecedente de un nivel por arriba de 43 mil unidades se registró el 23 de abril de 2013, cuando se ubicó en 43 mil 113.61 puntos.

Al respecto, analistas del grupo financiero Santander México mencionaron que el repunte del mercado accionario estuvo impulsado principalmente por el inesperado recorte en la tasa de referencia de BdeM y por el aumento en el estímulo monetario del Banco Central Europeo.

Pero no obstante el salto provocado por la política del banco central mexicano, los especialistas de este grupo financiero mencionaron que el lento crecimiento económico registrado en el primer trimestre y que probablemente se extienda hacia el segundo de 2014 y que les llevó a bajar sus expectativas del producto interno bruto (PIB) a 2.5 por ciento en el año, desde 3 por ciento, también los condujo a reducir el precio objetivo de las acciones de diversas emisoras de la muestra del IPC: Hemos decidido revisar a la baja nuestro objetivo del IPC para finales de 2014 de 47 mil a 45 mil 500 puntos.

Pero no sólo la BMV registró el impacto de la política monetaria del Banco de México. También el mercado cambiario fue escenario de un brinco de 11 centavos en el precio del dólar, suficiente para saltar de nuevo la frontera de los 13 pesos en las grandes operaciones interbancarias, como no ocurría desde el pasado 6 de mayo. La divisa estadunidense se vendió a 13.0285 pesos, lo cual implicó una depreciación de la moneda mexicana de 0.86 por ciento en una sesión. En los bancos el dólar se vendió al público a 13.34 pesos y se compró a 12.74.