Madero, Tamps., 15 de julio.

Este martes se conmemoran 100 años de que la refinería Francisco I. Madero fue establecida, en ese entonces propiedad de la Compañía Mexicana de Petróleo El Águila, de capital inglés.

Debido a la discusión en el Senado de las leyes secundarias en materia energética, el líder nacional del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana y senador, Carlos Romero Deschamps, no acudió a la celebración. Tampoco estuvo el director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, ni el gobernador Egidio Torre Cantú.

Una planta estratégica

Desde su instalación en 1914, la planta Madero ha sido considerada estratégica. Tomás Ávila González, subdirector de Pemex-Refinación, en representación de Lozoya, llamó a las instalaciones eje principal y de gran importancia para el proyecto de reforma y modernización que impulsa el presidente Enrique Peña Nieto.

El rumbo que ha marcado el gobierno federal nos está invitando a un reto muy importante con la reforma energética, y por ello es que la refinería Madero debe jugar un papel muy importante en el país. Somos una refinería muy estratégica y afortunadamente, con la ubicación geográfica en la que se encuentra, tiene mucho potencial. Es por ello que insisto que contamos con experiencia en todos y cada uno de ustedes, expresó.

“El 15 de julio de 1914, la Compañía Mexicana de Petróleo El Águila, propiedad del inglés Weetman Pearson, se estableció en el poblado de Doña Cecilia –ahora Ciudad Madero–; tenía una producción de 20 mil barriles por día”, comentó el ex superintendente de la terminal marítima Madero, Efraín Hinojosa Gallegos.

Asentada en una superficie de 554 hectáreas con 22 plantas, la instalación produce 190 mil barriles por día, cubriendo las necesidades del Golfo de México y del centro del país de gas licuado, gasolinas Magna y Premium, diésel, turbosina, diésel desulfurado y marino, coque, asfaltos y azufre.

En este complejo industrial petrolero trabajan 4 mil 400 obreros y ejecutivos de base, personal de confianza, transitorios, contratistas y prestadores de servicios diversos. En las inmediaciones de la refinería opera la terminal marítima Madero, puerta de entrada y salida de producto crudo o ya procesado en la que laboran casi 2 mil trabajadores de Pemex.