Berlín, 19 de agosto.

Durante años los lingüistas han sostenido que el vasco es una lengua aislada sin influencia alguna de sus vecinos. Ahora, un catedrático de la Universidad de Bamberg, en Alemania, lo pone en duda tras descubrir influencias del gascón en la lengua del País Vasco.

Martin Haase, docente de lingüística románica, ha revolucionado la lingüística tras descubrir que el gascón (conjunto de dialectos románicos que se hablan en Gascuña), tuvo cierta influencia en el vasco, informó hoy la Universidad de Bamberg.

Los científicos alegaron que la protegida situación geográfica del País Vasco propició el aislamiento de su lengua, escribieron en un comunicado.

Por otro lado, existe consenso en que el vasco repercutió en otras lenguas más allá de las fronteras de la región y que a través de ese contacto se originó junto con el románico el gascón, explicaron recordando el gran número de vascos originarios del sur de los Pirineos que emigraron a la histórica provincia de Gascuña, en el suroeste de Francia, difundiendo su idioma.

También la Academia Vasca ve el vasco como una lengua aislada, que influyó a otras, pero sin dejarse influir por ellas.

Sin embargo, Haase descubrió lo contrario durante una investigación en Gascuña: el gascón influyó en el vasco, no al revés. Un ejemplo es la entonación en la segunda sílaba de una palabra en vasco, que según Haase, sólo se puede explicar en conexión con el gascón.

Haase informó de sus hallazgos a la Academia Vasca. Los resultados de su trabajo serán difundidos en el Congreso de Lingüística Romana y Filología, en Nancy.