Guanajuato, Gto., 17 de octubre.

Textos, música, sombras, movimientos y multimedia son los recursos utilizados en el escenario por la compañía del coreógrafo mexicano José Besprosvany, para interpretar una nueva versión de Edipo, con guión de Olivier Kemeid, basado en la obra original de Sófocles.

Sin eludir temas como el niño abandonado, el adivinador, el individuo que toma el poder, el parricida que ignora que lo es, el incestuoso que también no lo sabe, el hombre que se castiga a sí mismo, la propuesta contemporánea de Besprosvany causó grata sorpresa en su presentación del miércoles en el Festival Internacional Cervantino (FIC).

Desde que emergen las siluetas de cinco bailarines, cuya sombra se proyecta en una pantalla de fondo, hasta la muerte de Yocasta y Edipo, el público permaneció atento a esta tragedia griega, cuyo eje es la búsqueda de la verdad.

La propuesta, que conjuga teatro y danza, describe el funesto destino del hombre que busca a toda costa la verdad sobre sí mismo, aunque al final no deja claro si Edipo es un héroe o un monstruo.

Un lenguaje más actual

Besprosvany, también director de la compañía, quien reside en Bélgica, en la obra hace referencias a la época contemporánea de caos civil y revueltas, así como a la propagación de una enfermedad causada por los migrantes.

Es un Edipo moderno que viste de traje, que investiga la muerte de Layo, que escucha las demandas de la sociedad y que el remordimiento del pasado no lo deja en paz.

La adaptación, apegada a la obra de Sófocles, conserva los mismos nombres de los personajes, pero cambia un poco en el lenguaje, que es más actual, y la investigación en torno al asesinato de Layo juega un papel predominante.

Edipo es la historia del hombre que juega con la muerte desde que nace, del líder que con las tempestades se convierte en tirano y su familia está invadida por el crimen y no lo ve. Se trata de la vida de un hombre que prefiere morir caminando hacia la verdad que cobijado por la mentira.

Con diálogos en francés y subtítulos en español, la obra de José Besprosvany se estrenó en 2013 y ha sido aclamada por la crítica europea, debido a esa mezcla que hace de la palabra, la música, el video, la coreografía y el movimiento del tiempo.

En la tragedia del hombre que se priva de la vista cuando ve la verdad de su existencia, actuaron Gauthier Jansen (Edipo), Isabelle Roelandt (Yocasta, esfinge, nodriza), Georges Siatidis (Creonte), Charles Cornette (Pólibo, el anciano, Tiresias, Layo) y Toussaint Colombani (el joven).

Reconocido en el ámbito internacional como uno de los reformadores de la danza contemporánea belga francófona, Besprosvany combina escenas con coreografías fuertes e impactantes ejecutadas por los bailarines que en la trama fungen como el coro.

Un toque moderno que también sobresale en el montaje del coreógrafo mexicano son los pasajes audiovisuales y de teatro de sombras, que dan mayor agilidad a la trama y muestra que diferentes disciplinas pueden vincularse de manera coherente.

Edipo, dirigida por Besprosvany, que se presentó en la edición 42 del FIC, llega a la ciudad de México este sábado 18 y domingo 19, al Teatro Juan Ruiz de Alarcón del Centro Cultural Universitario (Insurgentes Sur 300, Ciudad Universitaria).