Legisladores perredistas piden información clara y objetiva sobre sus propiedades
El que se hable de ‘‘intentos desestabilizadores’’ eleva el tono de crispación, señala el sol azteca
Miércoles 19 de noviembre de 2014, p. 4
La defensa que emprendió el presidente Enrique Peña Nieto de su entorno familiar (en el tema de la casa de Lomas de Chapultepec) y de las acciones de su gobierno para resolver la crítica situación que vive el país, generó controversia en la Cámara de Diputados.
Legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) coincidieron con la salvaguarda que el mandatario hizo de su familia y de las instituciones; en contraparte, legisladores perredistas demandaron información clara y objetiva de la autoridad sobre el origen de los recursos para adquirir la casa de Sierra Gorda, y el estado en que se encuentra la investigación de los 43 estudiantes desaparecidos; advirtieron también que la alocución del Ejecutivo contribuye a elevar el tono de crispación social.
Tomás Torres, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y vicepresidente de la mesa directiva, coincidió con la postura del mandatario ‘‘en el principio de colocar la salvaguarda de su familia y de garantizar la integridad ética y moral de los suyos. Creo que su posición de ser el jefe del Ejecutivo lo coloca en el terreno de la defensa de su familia, y con toda corrección toma una postura digna’’.
El diputado zacatecano expuso que en principio se debe reconocer que existe una situación crítica y terrible, derivada de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa, y otros hechos que han derivado de años a la fecha, ‘‘pero es importante asumir una posición firme y reconocer que por efecto de las crisis surgen muchos detractores y en todo caso es momento de llamar a la política a través del diálogo y reconocer la fortaleza de las instituciones’’.
En esa perspectiva, el presidente de la Comisión de Gobernación, Alejandro Moreno Cárdenas (PRI), respaldó el contenido del mensaje presidencial, porque ‘‘el mandatario, como hombre de familia, defiende con valentía y honor el comportamiento ético y moral de los suyos. Se ha generado una campaña de desprestigio personal que ningún ciudadano puede tolerar desde su ámbito más cercano. ¿Por qué causa extrañeza que el presidente Peña Nieto defienda a su familia?’’, preguntó.
‘‘Desde su salida a la reciente gira internacional se manifestó una escalada de desprestigio que se ha combinado con el uso faccioso del dolor de los familiares de los 43 jóvenes desaparecidos. Lo que observamos en la actitud presidencial es la imagen de un hombre de Estado que tiene claro que el interés de la mayoría debe imperar sobre grupos minoritarios que, haciendo de la violencia su expresión, golpean el interés del pueblo y las instituciones del Estado.’’
Por el contrario, el diputado Roberto López Suárez, del PRD, consideró que ‘‘a la sociedad se le están vendiendo medias verdades. La compra de una casa tan suntuosa es un tema totalmente distinto a la investigación que se lleva para encontrar a los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Si el gobierno federal lo observa así, es su problema, y aún más cuando ya se habla peligrosamente de que sectores de mexicanos pretenden desestabilizar al país, lo que implica encender las alertas de la crispación’’.
Añadió que ‘‘el gobierno, que no el Estado, tiene que separar las cosas; no tiene que convencer a los medios de comunicación, sino a la sociedad, de que su investigación sobre los 43 desaparecidos es creíble. Y del otro tema, que se circunscribe al de su vida personal y familiar, él y su esposa deben dar una explicación del origen de los recursos económicos para comprar una casa tan suntuosa.
‘‘No es válido enarbolar la bandera de la denuncia de desestabilización, Enrique Peña Nieto debe comprender que sus posiciones y sus discursos pueden generar una conflictiva social espeluznante e inimaginable.’’
El vocero del sol azteca en San Lázaro, Carlos Reyes Gámiz, expuso que el gobierno mexicano ‘‘ha perdido franjas de gobernabilidad en muchas zonas del país, y escuchar un mensaje de un Presidente de la República con esos contenidos, lo coloca en un despropósito. Aseverar que hay ‘fuerzas oscuras que pretenden desestabilizar’, nos habla de que no hay visión de Estado’’.