El Estado brasileño no inhibirá ninguna indagatoria de la fiscalía, asegura la presidenta
se respetan las reglas del estado de derechoFoto Reuters
Viernes 21 de noviembre de 2014, p. 26
Brasilia.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aseguró este jueves aquí que no tuvo ni tendrá tolerancia con corruptos y corruptores, en medio de graves denuncias por millonarios desvíos de dinero en obras que afectan a la petrolera estatal Petrobras.
Durante una conferencia sobre educación, la mandataria sostuvo: queremos la investigación en su totalidad. La policía federal y la Fiscalía, instituciones del Estado brasileño, investigan a corruptos y corruptores, y no hay ningún tipo de presión del gobierno para inhibir las investigaciones
, dijo la presidenta, sin mencionar directamente el escándalo de la petrolera Petrobras.
Ante unas cuatro mil personas, la mandataria también afirmó que Brasil saldrá mucho más fuerte de este proceso, por respetar las reglas del estado de derecho en el que vivimos
.
El escándalo que involucra a Petrobras es investigado por la policía y la fiscalía, y sigue su trámite en secreto de sumario, aunque han ido filtrándose a la prensa algunas informaciones, ninguna comprobada hasta la fecha. Las informaciones han ido saliendo a la luz con las declaraciones de un empresario y presunto mediador del esquema y un ex director de la petrolera, que aceptaron entregar información a cambio de la reducción de la pena. Ha trascendido que las grandes empresas constructoras del país habrían aceptado por más de una década cobrar un sobreprecio en obras de la petrolera, dinero que serviría para ser distribuido a políticos, partidos e intermediarios. El escándalo en la que es la mayor empresa de Brasil involucraría desvíos por cerca de 4 mil millones de dólares en una década.
Más aún, el juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Gilmar Mendes, aseguró que el desvío de dinero en la trama de corrupción de Petrobras deja en pequeñas causas
el mensalao (el esquema de pago de sobornos a legisladores cada mes para la aprobación de iniciativas en el Congreso, que derivó en un juicio que concluyó el año pasado), hasta ahora la mayor red de corrupción en la historia del país.
Por lo pronto, el Banco Central confirmó el bloqueo las cuentas de 16 empresarios y ex directivos sospechosos de participar en el esquema de pago de propinas y comisiones en Petrobras. Tras un pedido de la justicia federal del estado de Paraná, fueron embargados 47 millones 887 mil 166 reales (18 millones 602 mil 14 dólares) pertenecientes a directores y altos ejecutivos de las constructoras OAS, Camargo Correa, Galvao Ingeniería, Engevix, Queiroz Galvao, UTC, Mendes Junior e IESA.