La mayoría de los 4 millones de beneficiados serán connacionales, expresa
Las normas, acto de justicia que valora su colaboración al desarrollo estadunidense, señala
Sábado 22 de noviembre de 2014, p. 17
El presidente Enrique Peña Nieto hizo ayer un reconocimiento al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por las medidas administrativas que anunció en materia migratoria, las cuales se enmarcan en un principio de elemental justicia, subrayó.
Agregó que la mayoría de los 4 millones de beneficiados con la decisión de la Casa Blanca serán de origen mexicano, y destacó que entre las ventajas es que las familias permanezcan unidas y puedan recuperar los lazos con sus parientes en México.
Estas normas, las más importantes que se han tomado en los 30 años recientes, son de alivio para migrantes y constituyen un acto de justicia que valora las aportaciones de millones de mexicanos al desarrollo de Estados Unidos, puntualizó Peña.
En el Encuentro Nacional de Procuración y Administración de Justicia informó que giró instrucciones a la cancillería para que se apoye a quienes quieran beneficiarse de las nuevas reglas.
José Antonio Meade, secretario de Relaciones Exteriores, explicó que los consulados cuentan con capacidad para enfrentar un aumento en la demanda de atención a solicitudes de asistencia, documentación y protección. Estamos listos; nos hemos preparado para esta coyuntura y apoyaremos a los potenciales
favorecidos, añadió.
Durante la ceremonia de despedida de becarios del programa Capacitación SEP-SRE-Proyecta 100 mil, el funcionario calificó el anuncio como paso trascendente que va a permitir cerrar la brecha de derechos entre migrantes y ciudadanos. Además, es un reconocimiento explícito a las contribuciones que hacen los primeros.
El canciller estimó que el programa beneficiará a cerca de 4 millones de mexicanos, tras considerar que es resultado de una lucha histórica de más de 30 años de las comunidades en Estados Unidos.
Coincidió con el presidente Obama de que quienes cruzan la frontera constituyen un valor agregado para la economía y la sociedad estadunidense. Sus aportaciones no sólo beneficiarán a la comunidad de aquel país, sino a la de México y de los propios migrantes.
Explicó que el proyecto implica la expansión del programa de acción diferida para los padres de ciudadanos estadunidenses o residentes permanentes y evitar deportaciones indiscriminadas.
El canciller subrayó que éstas medidas se dieron a conocer en un contexto en el que se han realizado trabajos diplomáticos que han permitido generar un entorno más favorable para la aprobación de acciones de este tipo.