San Cristóbal de Las Casas, Chis.

Alrededor de 8 mil católicos de la diócesis local realizaron ayer una peregrinación por el cuarto aniversario de la muerte del obispo Samuel Ruiz García, quien nos enseñó un camino de dar vida al pueblo pobre y marginado, dijo el obispo Felipe Arizmendi Esquivel. Los asistentes lanzaron demandas: exigieron que no se construya la autopista que comunicará a esta ciudad con Palenque, y que se suspendan los megaproyectos y proyectos mineros que afectan a las comunidades.

El obispo Felipe Arizmendi pidió no hacer caso si dicen que están locos por los reclamos en las manifestaciones. De Samuel Ruiz también se dijo que estaba loco, equivocado, pero en su vida fue un ejemplo porque luchó por los pobres. En su homilía hizo un llamado para expresarle a Dios y a la sociedad nuestros anhelos de una vida justa y digna, así como para manifestar inconformidad contra aquellos proyectos que pueden traer muerte.

Dijo que seríamos egoístas e irresponsables si no analizáramos lo que puede pasar a nuestros pueblos; si no procuramos buena información de lo que pueden implicar algunos proyectos, para ver si el mal que pudieran causar es mayor que el bien.

La peregrinación comenzó en el poniente de la ciudad, a las 9 horas, con la católicos de diferentes municipios de los Altos, el Norte y la Selva de Chiapas, quienes con imágenes religiosas, cantos y flores caminaron por calles y avenidas hasta llegar a la Plaza Catedral, donde Arizmendi Esquivel y el obispo Enrique Díaz, acompañados por varios sacerdotes, oficiaron una misa.

El Tatic nos enseñó el camino de dar vida a los marginados, dijo el obispo ArizmendiFoto Marco Peláez

“¿Hay quienes piensan que los que estamos aquí somos locos? ¿Te han dicho en tu casa, en tu familia, en tu comunidad, que para qué vienes a esta peregrinación? ¿Te han dicho que estás loco o loca? ¿Te han dicho que mejor te quedes en tu casa y no te metas en líos, que no te compliques la vida? ¿Te han dicho que lo que pides es una locura?, ¿que nada se puede cambiar, y que no nos queda más que aguantarnos? Del Tatic Samuel también se dijo que estaba loco, equivocado. Pero él nos enseñó un camino, el de dar vida al pueblo pobre y marginado”, dijo Arizmendi.

Detalló: No estamos locos, según los criterios de este mundo materialista y consumista. Pero sí estamos locos como Jesús, porque queremos una vida digna para todas y todos, porque no podemos quedarnos tranquilos y con los brazos cruzados, sin hacer nada, cuando vemos que hay proyectos que nos pueden perjudicar, destruir o dañar a nuestra madre y hermana tierra.

Sostuvo que “estamos locos, y bien locos, si nuestra locura es seguir a Jesús, dar nuestra vida para que nuestros pueblos tengan vida digna y evitar que se les cause muerte y destrucción. Estamos locos si soñamos con el Reino de Dios, con que todas y todos vivamos como Dios quiere, no como esclavos, sino como hombres y mujeres que tienen dignidad, derechos, que son personas y no objetos. Si seguimos luchando por el bien de nuestros pueblos. Este servicio a nuestros pueblos no es locura, sino sabiduría de Dios. Es la sabiduría de Tatic Samuel, que se sacrificó por nuestro pueblo”.