Viernes 30 de enero de 2015, p. 36
Cuernavaca, Mor.
El alcalde de Tlaquiltenango, Mauricio Rodríguez, dijo estar de acuerdo con que en ese municipio vuelva a operar el mando único estatal, pero exigió que se cambie al comandante designado, Pedro Antonio Rosas, a quien destituyó en diciembre pasado porque, dijo, no le entregaba informes y la población se quejaba de abusos.
Este jueves, un día después de que el gobernador Graco Ramírez emitió un decreto por el cual su administración asumió la seguridad del municipio, a fin de “restaurar el orden y la paz ante las alteraciones graves del orden público suscitadas recientemente
, el edil se entrevistó en Cuernavaca con el secretario de Gobierno, Matías Quiroz, a quien exigió que el comisionado estatal de Seguridad Pública, Alberto Capella, nombre otro mando.
El alcalde demandó audiencia con el gobernador para dar su versión sobre lo que ocurre en Tlaquiltenango, y sostuvo que no se opone a que el estado controle la seguridad, pero insistió en que no está de acuerdo en que Rosas sea el comandante, porque no informaba de sus labores a ningún integrante del cabildo. Explicó que por eso nombró en diciembre pasado a Herminio García, a quien el comisionado Capella acusó de no haber aprobado exámenes de control de confianza.
Todo esto desencadenó un enfrentamiento entre el alcalde, emanado del Partido del Trabajo, y el comisionado, quien denunció al edil ante la Procuraduría General de la República por haber violado las leyes federales y locales de Seguridad Pública al sustituir al mando impuesto por Capella.
El alcalde negó que haya disturbios, como dice el decreto, y aseguró que el municipio tiene menor incidencia delictiva que otros del sur de Morelos.