El catedrático Octavio Rodríguez Araujo consideró que no todos los movimientos sociales están en crisis, pero sí están un poquito deteriorados, pues ya no tienen la chispa ni el peso que tuvieron en los años 80.

Al presentar su libro Las izquierdas en México, agregó que por ejemplo la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación está dividida; no es lo mismo la sección 22 de Oaxaca, que la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación de Guerrero.

El profesor emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y autor de una veintena de libros relacionados con el sistema político y los partidos, dio a conocer su nuevo texto el jueves por la noche, en un abarrotado salón de Casa Lamm, en donde estuvo acompañado del senador Alejandro Encinas; de Edgar Sánchez, del Partido Revolucionario de los Trabajadores, y del académico Massimo Modonesi.

Durante el acto se registró una polémica sobre las elecciones y el estado en el que se encuentran los movimientos sociales y los partidos de izquierda. Rodríguez Araujo indicó que ya se sabe dónde va a ser el boicot a los comicios en Guerrero: en Tixtla, y no en Iguala.

El problema en el llamado a bloquear el proceso electoral es que la izquierda cree que son muchos, pero ello es falso. Este sector de la sociedad es una absoluta minoría, abundó.

Previamente, Edgar Sánchez informó que la Comisión Nacional de Ayotzinapa se reuniría para discutir qué se puede hacer para generalizar el boicot en el resto del país. Probablemente no se pueda extender, pero algo equivalente se tiene que hacer. Lo que no puede ser es apretar la nariz e ir a votar por el menos malo u optar por el voto útil, puntualizó.

Estimó que la crisis actual del sistema político-electoral es similar a la de 1976 –cuando de manera oficial sólo hubo un candidato a la Presidencia de la República–, en cuanto a desprestigio, falta de legitimidad y en la existencia de una izquierda oficial. El PRD es hoy el PPS de aquella época.

Pese a ello, consideró que el perredismo mantendrá su registro y posiciones importantes en los comicios de junio, porque eso es lo que le conviene al sistema.

El senador Alejandro Encinas dijo a su vez que las izquierdas mexicanas se encuentran en el extravío ideológico, hundidas en su laberinto y con una pérdida de claridad sobre el rumbo que deben seguir.

Resaltó que la problemática no es exclusiva de este sector, sino de las instituciones públicas, del sistema de partidos políticos que ya no representa a la sociedad, de la clase política y del Estado mexicano.

Para el ex jefe de Gobierno capitalino no sólo hay una crisis de la izquierda partidaria –institucional–, sino también de la izquierda social. Si se observa el sindicalismo independiente, el movimiento urbano popular y el campesino, se puede ver que también se han desdibujado. Por ejemplo, la lucha sindical buscaba evitar la relección de los dirigentes, pero en la actualidad todos los gremios independientes están encabezados por el mismo líder de hace 20 o 30 años.

Modonesi, docente de la UNAM y la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, señaló que el tema de las izquierdas ha sido poco estudiado en el país, por lo que el libro de Rodríguez Araujo es una contribución fundamental. Se trata de un libro de historia, aunque el autor diga que es un ensayo, en el que se hace un balance crítico, pero no autoflagelante de esta expresión.