Berlín.

El acto que siguen con pasión los melómanos del mundo entero se parece a una elección pontifical sin la guardia suiza ni la fumata blanca: en una ceremonia secreta, la prestigiosa Orquesta Filarmónica de Berlín elige el lunes a su nuevo director.

Sir Simon Rattle, de 60 años y melena blanca y rizada, ocupa el puesto de director artístico, que dejará en 2018.

La Filarmónica de Berlín, a la que algunos consideran la mejor orquesta del mundo, tiene la peculiaridad de que los músicos eligen a su director. En las demás orquestas son el consejo de administración o responsables políticos los que otorgan el puesto.

La Filarmónica de Viena, la mayor rival de la de Berlín, es una excepción y funciona sin ningún director asignado.

Otra característica de la Filarmónica de Berlín es que los directores suelen ocupar el puesto muchos años. Rattle es sólo el sexto en dirigir la orquesta creada en 1862, tras Hans von Bülow (1887-1892), Arthur Nikisch (1895-1922), Wilhelm Furtwängler (1922-1934 y 1952-1954), Herbert von Karajan (1956-1989) y Claudio Abbado (1990-2002).

Después de anunciar su marcha, Rattle fue contratado como director musical de la London Symphony Orquesta a partir de 2017, un año antes de abandonar Berlín.

Hace poco aseguró en una entrevista que el de Berlín es el trabajo de director de orquesta más difícil del mundo y el mejor. Recordó, además, que los años pasados en el característico edificio de la Filarmónica, cuyo exterior se asemeja a dos carpas de circo doradas, habían sido excepcionales.

La Filarmónica de Berlín puede permitirse elegir a un director entre los mejores. Unos 30 profesionales ya dirigieron la formación como directores invitados. Sin embargo, en teoría cualquier director de orquesta vivo puede ser considerado candidato, explicaron hace poco los dos delegados de la filarmónica, Peter Riegelbauer y Ulrich Knoerzer. Ciento veinticuatro músicos se reunirán el 11 de mayo en algún lugar de Berlín para elegir al sucesor de Rattle.

Habrá papeletas y urnas, y se prohibirán los teléfonos móviles. La elección debería hacerse en varias vueltas, con una lista de candidatos que se reducirá a medida que avancen las votaciones, hasta que una mayoría clara se decida por un nombre, explicó la portavoz de la orquesta, Elisabeth Hilsdorf. Luego habrá que llamar al elegido para asegurarse de que acepta la oferta. Si rechaza el puesto, se hará una segunda votación.

Cuando los votantes se pongan de acuerdo, convocarán a la prensa en un lugar desde donde la llevarán al sitio del voto. Los músicos deben guardar secreto sobre sus intenciones, pero en el mundo de la música clásica circulan nombres de posibles candidatos.

Hasta hace poco, muchos expertos vaticinaban un duelo entre el israelí-argentino Daniel Barenboim, de 72 años, y el alemán Christian Thielemann, de 56 años, directores que en ocasiones anteriores ya estuvieron entre los candidatos para dirigir la Filarmónica de Berlín. Barenboim indicó, sin embargo, que esta vez no es candidato.