Para el grupo Los Toreros Muertos la crisis económica que sufre España, en particular en el renglón musical, “representa un problema muy serio porque el gobierno impuso como castigo a los artistas tendientes a la izquierda un IVA de 21 por ciento a los discos y los conciertos, lo que complica aún más la situación por la crisis que padece también la industria del ramo.

El punto que encontramos afortunado es que ante esta medida la gente está reaccionando con más arte. Cuando los tiempos son más duros el arte madura más, no es tan banal; los artistas sienten una necesidad mayor de compromiso con lo que dicen, y eso siempre es bueno.

La plática con Los Toreros Muertos se realiza a propósito de las presentaciones que harán el próximo viernes en el C3 Stage, en Guadalajara, y el sábado en el Foro Indie Rocks, de la ciudad de México, en el contexto de una gira por sus 30 años de trayectoria.

La miel en los labios

El grupo, integrado actualmente por Pablo Carbonell, Guillermo Piccolini, Many Moure y Tony Iglesias, dijo que esta visita a México es la frutilla del postre de esta celebración de nuestros 30 años. Hace 26 vinimos a tocar en el Rock Stock, pero nos quedamos con la miel en los labios. No pudimos hacerlo y regresamos a España. Durante mucho tiempo habíamos querido tocar en México; hablamos con mucha gente, hubo muchas ofertas que nunca se concretaron. Que ahora se logre es un sueño.

El grupo creador de temas básicos en el rock en español como Mi agüita amarilla, Yo no me llamo Javier, Me gusta jugar con mi amigo Manolito, Soy un animal, Hoy es domingo y Tu madre tiene bigote adelantó que en este rencuentro se han vibrado bastante bien, al punto que estamos pensando hacer un nuevo disco con canciones inéditas. Ahora uno de nuestros sueños es estar en el Vive Latino. Con visitar México nos conformamos, pero si nos llevan al Vive Latino no nos van aguantar en nuestras casas.

Después de un periodo de inactividad Los Toreros Muertos “regresamos a tocar juntos en 2007 cuando sacamos una recopilación. Hicimos tres conciertos más o menos importantes en España; nos dimos cuenta de que nos divertíamos, la pasábamos bien y que no hacía falta que nos pagaran para tocar. Así que continuamos con los conciertos de es manera, sin tener una oficina ni una discográfica, sino tocar cuando nos diera la gana. Comenzamos a presentarnos en los bares de Madrid, sin anunciarnos, sólo de boca a boca, y los shows se ponían a reventar. Regresamos a nuestro origen, así lo hacíamos al principio.

También hicimos cosas esporádicas. Nos llamaron para ir al Rock al Parque en Colombia. Comenzamos a hacerlo más seguido, y de repente no dimos cuenta de que este año cumplíamos 30, así que sacamos un disco en vivo, porque el concierto en directo es lo mejor que siempre hemos hecho.

Sobre la manufactura del disco en vivo por las tres décadas, Los Toreros Muertos dicen: “El pasado invierno nos juntamos, ensayamos dos horas y nos fuimos de gira andaluza e hicimos siete conciertos en 10 días, cerrando en el Gran Teatro Falla de Cádiz, y ahí grabamos el disco en vivo de una sola toma con cuatro canciones nuevas: La naturaleza, Sin dios, Toma una flor y Hasta siempre. Todos los conciertos que dimos fueron sold out, un poco exagerados”.

A la pregunta de por qué fueron Los Toreros Muertos y no otro grupo, expresaron: “Los 80 tenían mucho de pose; los grupos estaban muy producidos en sus peinados y vestuario. Esto siempre lo ha habido, pero en aquellos años se explotó mucho. Nosotros éramos los bichos raros porque no teníamos que ver con ese asunto. Nunca nos encasillamos en un estilo musical determinado, sino en ser siempre un combo punk como nos llamó Rubén Blades. El punto del grupo más o menos era que éramos un poco diferentes al resto; al menos en algunos aspectos del uso que había en el mundo del pop y del rock”.

Agregan: “¿Por qué fuimos Los Toreros Muertos y no otros? Eso no tiene muchas respuestas porque el grupo se formó en vivo a lo largo de muchas jam sessions. Los temas los hacíamos ahí en directo. En un momento nos conformamos como grupo, pero eso fue después de que ya habíamos tocado varias veces y comenzamos a tener algo parecido a un repertorio, pero nosotros nos presentamos a diario en vivo delante del público; hubo mucha magia”.

El nombre “se nos ocurrió porque en la semana que teníamos que elegirlo murieron los toreros Francisco Rivera Paquirri y José Cubero Sánchez El Yiyo. Los Toreros Muertos fue uno de los nombres que nos encontramos cuando robábamos lápidas en los cementerios, y entonces lo elegimos”.

Los boletos para ver los dos shows están a la venta en las taquillas de los inmuebles y en los sistemas en línea Superboletos y Ticketmaster.