Sociedad y Justicia
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23% de la población no aceptaría vivir con personas con otra cultura

En México la diversidad todavía se percibe como amenaza: Conapred

Legado de la Colonia, relacionado con la dificultad para aceptar al otro

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De acuerdo con cifras nacionales, sólo 60 por ciento de los mexicanos estarían dispuestos a que vivieran en su casa personas de otra raza. La imagen, en la Feria de las Culturas Amigas, realizada este mes en el Zócalo de la ciudad de MéxicoFoto María Meléndrez Parada
 
Periódico La Jornada
Viernes 22 de mayo de 2015, p. 40

El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) destacó que en el país la diversidad aún es percibida como amenaza a la identidad común.

De acuerdo con cifras nacionales, 60 por ciento de la población afirma que estaría dispuesta a permitir que en su casa vivieran personas con cultura distinta, 13.7 en parte estaría preparada y 23.4 por ciento respondió que no.

En el contexto del Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo, el Conapred indicó que porcentajes similares se encuentran en las respuestas a la pregunta de si estaría dispuesto a que en su casa vivieran personas de otra raza. Asimismo, 38 por ciento considera que los mexicanos pueden construir una gran nación sólo si tienen cultura y valores semejantes.

Señaló que el reconocimiento a la diversidad cultural en el país se relaciona con el hecho de que durante la Colonia y la Independencia se constituyó culturalmente como sociedad homogénea, con alta estima por los valores únicos: una sola religión, bandera, identidad, una sola preferencia.

Se puede afirmar, dijo, que ese legado está estrechamente relacionado con las dificultades que tiene actualmente la sociedad mexicana para reconocer, aceptar y convivir con la diversidad, así como con la falta de reconocimiento de los derechos de los grupos con identidades sociales, genéricas, étnicas y religiosas diferentes a las consideradas mayoritarias. Esto es todavía un punto pendiente de la agenda antidiscriminatoria en nuestro país.

Añadió que la Constitución reconoce la identidad y las unidades sociales, económicas y culturales de las comunidades indígenas, además de su derecho a la libre determinación en un marco legal de autonomía que asegure la unidad nacional.

Desde la perspectiva de las personas migrantes, manifestó que en las sociedades actuales, cada vez más diversificadas, es importante garantizar la convivencia pacífica entre personas y grupos con identidades culturales diferentes, como forma de contribuir a la paz, la seguridad y el desarrollo a largo plazo.

México es una nación de tránsito, destino, origen y retorno para millones de migrantes que abandonan sus comunidades en busca de nuevas y mejores oportunidades de vida, quienes son portadores de gran riqueza cultural, expresiones artísticas, tradiciones, lenguas y costumbres de gran valor que enriquecen la diversidad cultural de los pueblos que se encuentran en su camino y destino.

No obstante las convenciones y acuerdos internacionales y regionales en materia de derechos de los migrantes, con frecuencia son víctimas de discriminación, xenofobia y diversas violaciones a sus derechos humanos, basados en la raza, origen étnico, situación socioeconómica, nacionalidad, edad, estatus migratorio y las cualidades que se perciben asociadas a su género.

Es necesario redoblar esfuerzos para que los estados garanticen a los migrantes espacios y oportunidades de integración al desarrollo y a derechos sociales como salud, educación, vivienda, entre otros.