Para financiar proyectos contra el cambio climático, México recibió entre 2006 y 2014 recursos internacionales que suman 109 mil 311 millones de pesos: 93 por ciento fueron préstamos y el resto donativos, señala el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC).

Aunque los países donantes y los organismos internacionales piden transparencia en el uso y destino de los recursos, desafortunadamente en nuestro país los esfuerzos para hacer pública y accesible esta información son aislados y con poco seguimiento, indica en el informe Identificación y análisis de los flujos financieros internacionales para acciones de cambio climático en México el organismo descentralizado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

Destaca que las aportaciones han sido fundamentales para hacer frente al cambio climático y para que México pueda cumplir con los acuerdos a escala internacional en cuanto a disminución de emisiones, estrategias de mitigación, adaptación y disminución de la vulnerabilidad.

El reporte indica que los países que más recursos aportaron a México fueron Francia, Alemania, Japón y Canadá, mientras que de los organismos internacionales el Banco Mundial ha aportado 65 por ciento y el Banco Interamericano de Desarrollo 25.

Entre los rubros a los que se han destinado los recursos está mitigación, es decir, acciones para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, a lo cual se destinaron 102 proyectos y 60 mil 115 millones de pesos, de los cuales 49 mil 487 millones fueron préstamos. Le sigue adaptación y vulnerabilidad, con 33 mil 75 millones, de los cuales mil 250 millones fueron donativos y el resto préstamos, para 26 proyectos. Después, cambio climático en general, con 31 proyectos, recibió recursos por 16 mil 95 millones de pesos.

Agrega que el sector energético es al que se destinaron más proyectos, sobre todo para la construcción de plantas eólicas y programas de sustitución de focos y aparatos eléctricos, pero a nivel gubernamental se siguió privilegiando la inversión para la explotación de hidrocarburos. Después están los proyectos de medio ambiente, donde destacan los forestales, y los multisectoriales, que concentran más de 90 por ciento del financiamiento.

El INECC hizo el análisis a partir de información que recibió de diversas agencias de cooperación internacional, organismos financieros internacionales, organizaciones de la sociedad civil y dependencias gubernamentales vinculadas en forma directa o indirecta con el proceso de financiamiento a México en materia de cambio climático.

En Oaxaca, Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Chiapas y Jalisco en ese periodo se presentó el mayor número de proyectos, mientras que Colima, Morelos y Baja California Sur no registraron proyectos de cambio climático financiados con recursos internacionales.

El reporte advierte que a pesar de los esfuerzos que los tres niveles de gobierno realizan para minimizar los impactos negativos del cambio climático y diseñar medidas de adaptación, este esfuerzo no ha sido homogéneo a lo largo del país.