San Cristóbal de Las Casas, Chis.

El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) expresó su “preocupación por las nuevas agresiones y amenazas contra bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) de las comunidades de El Rosario y Nuevo Paraíso, situadas en los municipios autónomos de San Manuel y Francisco Villa, respectivamente.

Asimismo, exigió de manera urgente que se investiguen los actos de agresión y hostigamiento perpetrados por los grupos armados de Pojcol y El Rosario, se sancione a los responsables y se deslinden responsabilidades en el homicidio en grado de tentativa contra la niña de 13 años, ocurrido el 10 de mayo. En esa ocasión dispararon hacia donde estaba la adolescente, pero su padre al percatarse de lo ocurrido lanzó piedras y lesionó al agresor.

En un comunicado, el Frayba asegura que hay omisión de los gobiernos municipales y estatal para atender la problemática y deslindar responsabilidades en los hechos suscitados en estas dos localidades.

El organismo que preside Raúl Vera López, obispo de Saltillo, Coahuila, recuerda que el pasado 10 de mayo la junta de buen gobierno El camino del futuro, con sede en La Garrucha, Ocosingo, informó que un grupo de 28 personas del ejido Pojcol, barrio Chiquinival (municipio oficial de Chilón), junto con otro grupo de 21 personas de El Rosario hostigó y agredió a las bases zapatistas de esta comunidad autónoma.

Dijo que en esa ocasión, Andrés López Vázquez realizó cuatro disparos contra una niña de 13 años, hija de un indígena base de apoyo zapatista, y posteriormente, tres personas armadas del mismo grupo agresor llegaron al poblado Nuevo Paraíso y tiraron una carta en la que culpan a las bases zapatistas de ocasionar los problemas.

Señala que ante estos hechos, el Frayba envió el 14 de mayo el oficio 059-015-15/34/2015, en el que se informa al gobierno de Chiapas sobre las agresiones armadas ocurridas, mismo que fue contestado por Carlos Leonel Solórzano Arcia, subsecretario de gobierno de la región XII Selva Lacandona, reconociendo el ingreso de personas armadas en El Rosario. Sin embargo, no menciona acción alguna para esclarecer los hechos y prevenir repeticiones que conlleven a la sanción de los responsables; contrario a ello, entregaron despensas por parte del DIF al grupo agresor, además de que en el escrito no hace referencia a investigar el intento de homicidio contra la niña.