Estamos decepcionados por su renuncia, dijo el portero Mandanda
Lunes 10 de agosto de 2015, p. 7
Marsella.
Los directivos del Olympique de Marsella expresaron su molestia con el entrenador argentino Marcelo Bielsa, principal candidato para dirigir a la selección mexicana, por su sorpresiva renuncia, al asegurar que el estratega intentó imponer su ley en el equipo y sólo piensa en sus intereses personales.
El Olympique no puede ser prisionero de alguien que coloca sus intereses personales muy por encima de la institución
, expresaron los directivos del equipo francés.
El Olympique tiene una historia suficientemente rica que le permite negarse a someterse a la ley de un solo hombre
, añadió.
Bielsa, de 60 años, anunció su renuncia la noche del sábado, después de que su equipo perdió 1-0 ante el Caen en la primera jornada de la liga francesa.
El argentino aseguró que el club no respetó el acuerdo verbal que tenían para la renovación de su contrato.
El entrenador, quien llegó hace un año al Marsella, cobraba 19 mil euros al mes, el mínimo sindical para un entrenador, lo que le permitía romper en cualquier momento su contrato.
El futuro de Bielsa, ex entrenador de las selecciones de Argentina (1998-2004) y Chile (2007-2011), parece apuntar a la dirección técnica del Tricolor, donde podría llegar a cobrar al menos 100 mil dólares mensuales.
En caso de que el Loco acepte dirigir al Tri, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) tendría que acoplarse a lineamientos del argentino, quien no estaría dispuesto a participar en campañas publicitarias, uno más de los aspectos por los que fue criticado Miguel Herrera cuando estuvo al frente del conjunto nacional.
Asimismo, la FMF tendría que comprometerse a restructurar el Centro de Alto Rendimiento y llevar a cabo filtros médicos y físicos para los jugadores convocados.
La renuncia sorprendió a sus futbolistas. Es una gran sorpresa, un mazazo. Él fue alguien muy importante para el club. Estamos muy decepcionados
, dijo el portero Steve Mandanda.
El estratega deja el equipo francés con un balance agridulce por un juego vistoso, la franqueza de sus planteamientos y un método particular que devolvió la ilusión del buen juego a los aficionados.