El Loco revolucionaría al futbol mexicano
Otra decepción del Tuca
l futbol mexicano se entusiasma con la posible llegada de Marcelo Bielsa al Tri. Después de la turbulencia que representó la etapa del Piojo Herrera, el Loco podría dar cordura a un futbol mexicano que ya perdió el rumbo.
Al argentino de 60 años le apodan el Loco por su adicción enfermiza al trabajo: pasa horas viendo videos de futbol, trabajando la táctica en los entrenamientos y se preocupa también de la vida personal de sus dirigidos. Chapado a la antigua, no gusta de las modas que los futbolistas adoptan: preocupados más por el peinado que por el golpeo de la pelota.
A los técnicos actuales les encanta que los llamen míster y disfrutan usar trajes perfectos, finos. Bielsa, en cualquier circunstancia, prefiere la ropa deportiva. Pero más allá de la forma, al rosarino le gusta el fondo: el juego más allá de los resultados; por ello se ganó en unos meses a la tribuna del Olympique, porque siempre buscó el futbol ofensivo.
Y, lo más importante, al Loco lo que más le preocupa es el trabajo en fuerzas básicas. Bielsa cumplió en 1998-2004 su sueño de dirigir a la selección argentina, pero siempre guardó especial cariño por su trabajo en divisiones inferiores. Y es aquí donde Bielsa podría cambiar al futbol nacional.
En el torneo Apertura 2015, los equipos de la primera división tienen un promedio de ocho elementos no nacidos en México, lo que, por supuesto, afecta la formación de la selección nacional. Los técnicos previos del Tri se tuvieron que adaptar –por no decir conformar–, pero el Loco podría exigir a los dueños del balón un cambio en el formato para dar más oportunidad a los jóvenes. Un nuevo rumbo, un nuevo impulso a las fuerzas básicas, tan despreciadas ahora por ese turbio negocio de directivos y promotores en las contrataciones en Sudamérica.
Luego de su abrupta renuncia al Marsella, lo que ya había hecho en el Español de Barcelona, en Argentina se dice que el Loco tomará un año sabático, pero en México se convirtió en el más firme candidato.
Versiones de prensa indican que en Francia ganaba 19 mil euros al mes. Poco, comparado con los más de 100 mil dólares por sueldo que recibiría en el Tricolor, más las infaltables cuestiones comerciales que tanto enfadan al Loco.
En la misma semana, Ricardo Ferretti demostró que si con el superreforzado Tigres no pudo ganar la Libertadores, con el disminuido Tri no habría lugar para el optimismo. Con el poder de la chequera, al Tuca le armaron un trabuco que algunos hasta consideraron el mejor equipo del continente.
Sin embargo, los Tigres decepcionaron y fueron incapaces de anotar un gol ante una versión bastante gris del River Plate. Pero Ferretti tiene manga ancha con los directivos felinos y con unos aficionados que todo le perdonan, así que difícilmente aceptará dejar su zona de confort para ocupar la silla del Tri, que algunos consideran es eléctrica.
En la carrera tricolor, Ricardo LaVolpe parece rezagado. Ha sido el único que en tiempos recientes ha completado el ciclo mundialista. Caminando
, definió el argentino, que ahora tiene a Jaguares jugando un futbol agradable. Fue Carlos Reinoso quien lo postuló, por conocer el medio nacional. El ex portero no es un mal candidato, pero sus posibilidades disminuyeron ante la alineación de los astros en torno a Bielsa.
En el torneo local, Enrique Meza demuestra su sapiencia al llevar al Morelia, sotanero de la temporada pasada, al liderato general con tres victorias. En el otro extremo, el campeón Santos Laguna suma tres caídas en este inicio de torneo. Y eso, dicen, sólo pasa en México, lo que refleja irregularidad, pero también emoción jornada a jornada.
Los mexicanos en Europa siguen con futuro incierto. Raúl Jiménez parece despreciar al West Ham, pero el cuadro inglés optaría por Javier Hernández, quien regresó al Manchester United y le dieron otra vez el número 14, pero también su acostumbrada banca.
