Lo dicho por el papa Francisco, de que los divorciados no han sido bien tratados por la Iglesia católica y no están excomulgados, es un gran avance y confirma que busca una línea pastoral para abrir el tema sin modificar la doctrina, consideraron expertos en temas religiosos y organizaciones vinculadas con ese ámbito.

Fray Julián Cruzalta, asesor teológico de Católicas por el Derecho a Decidir, señaló que es relevante que el pontífice haya tocado el tema desde esa perspectiva, sobre todo meses antes del sínodo de la familia, que se realizará en el Vaticano en octubre próximo.

Hay teólogos que lo han dicho, pero no son el Papa, quien con esas palabras está dejando muy desbancados a los conservadores católicos. Vio que es difícil meterse con esa gente, y buscó el camino. Esto es un avance para buscar una salida pastoral, sin cambiar la doctrina de fondo. Vaticinó que ese aspecto será relevante en el encuentro de obispos de octubre próximo.

Ignacio Cuevas, analista del Observatorio Eclesial, declaró que la apertura de Jorge Mario Bergoglio hacia los divorciados es una señal positiva, porque sigue en la línea de un discurso incluyente, que a la larga se traducirá en acercamiento a sectores que están distanciados del credo. Sentirán mayor pertenencia, apuntó.

En entrevista, indicó que esas actitudes del pontífice son saludables para la Iglesia y la sociedad, pues son mensajes directos a los sectores conservadores para que modifiquen sus comportamientos.

Vemos muy bien que el Papa sigue avanzando en revisar los aspectos dogmáticos de la Iglesia, está poniendo por delante a las personas. Dice que la Iglesia es una madre, y como tal no puede abandonar a sus hijos.

Añadió que el pontífice va preparando terreno para que haya nuevas posturas de los jerarcas, en la víspera de dicho sínodo. Coloca estas ideas para que se vayan pensando, previo al Sínodo de la Familia, ya que ese tema aún está muy cerrado en la Iglesia. Muchos obispos sólo aceptan un tipo convencional de familia, pero el Papa se abre a otras formas. Por ejemplo, está el tema de las madres solteras. Ahora toca el de los divorciados, el cual puede avanzar.

Elio Masferrer Kan, especialista en temas religiosos y profesor emérito de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, consideró que el máximo jerarca de la Iglesia católica se apega a lo que expone la doctrina de dicho credo y al derecho canónico, pero da una particular interpretación de ésta, la cual se aleja de los estereotipos conservadores.

Cruzalta indicó que el Papa es un hombre práctico, un pastor y da signos esperanzadores para responder a una problemática concreta que aleja a un sector de la Iglesia. Hay gente católica que realmente sufre por ser divorciada y sentirse excomulgada. Pero el pontífice entiende que la Iglesia no puede ser intransigente ante ese dolor y va a hacer un malabarismo para modificar algo sin tocar el fondo.

De acuerdo con cifras del Inegi, el número de divorcios en el país ha ido en aumento desde 1980. Mientras en ese año estaban en esa condición cuatro de cada 100 matrimonios, en los 90 y 2000 la cifra se elevó a siete. En 2005 a 12, y en 2012 a 17.